miércoles, 14 de octubre de 2015

DESDE YÁ

Todo laberinto debe tener una salida
pero para no perderse en él
lo mejor es no entrar

Ante propuestas de sumisión
respuestas tajantes


.- No se lo tomes a mal,
con lo majo que parece.
.- Lo adoro con toda el alma,
pero ya, no me merece.

.- Eso es una tontería,
tu padre también gritaba.
.- Porque tú lo consentías,
a mí no me rechistaba.

.- En la vida de pareja,
siempre hay que perdonar.
.- Que lo perdone su madre,
que no lo supo educar.

.- Se he pasado con las copas,
y la mano se le ha ido.
.- Excusarse en el alcohol,
no es gesto de bien nacido.

.- Es que los celos me turban,
amor mío ten paciencia.
.- Si me levantas la mano,
te dejo sin descendencia.

.- Debes de ser buena esposa,
hay que aguantar por los hijos.
.- Pues que lo aguante su madre,
que para eso lo ha parido.

Y así podría seguir,
pero creo que es bastante,
no existe una relación
cuando el respeto se pierde,
en tu mano está CHIQUILLA,
que la frase NI UNA MÁS,
cuando pasen unos años
no se vuelva a pronunciar.






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