A la mañana siguiente comenzaba la
rutina de nuevo, todo como si fuera el primer día, Jaime, fue el primero que
llegó a despertarlo, hoy desayunarían juntos en la sala de monitores, mientras
tanto, haría efecto un liquido con el que pulverizo toda la habitación; al fin
y al cabo, era un quirófano, aunque no fuese a utilizarse para ese fin en unos
días.
El director llegó a su despacho, con la
intención de coger la carpeta hacer copia de todos los documentos, registrarlos
y llevarlos a la sala de juntas; tenía ganas de ver la cara de alguno de sus
colegas, al tiempo que les comunicaba el cese de los neurocirujanos.
Al entrar se encontró con que habían
metido dos cartas por debajo de la puerta.
Una era del doctor Prieto, en ella solicitaba encarecidamente el
traslado a otro centro hospitalario, a poder ser el Santa Eufemia, desde el
cual le habían solicitado pidiese el traslado en varias ocasiones, era un
doctor con buena reputación a nivel mundial, debido a sus muchas
investigaciones publicadas.
La otra del doctor Andreu, constatando su compromiso a operar en el
plazo de una semana a Francisco, aunque estuviese fuera del proyecto y
mostrando su disposición a colaborar en caso necesario, hasta que se uniese al
equipo un sustituto que ocupara su lugar.
Ya en la sala de juntas, todos estaban
esperando, ya habían oído campanas, pero querían la confirmación de lo que
parecía eran, chismorreos de pasillo.
Los más conservadores, pusieron
el grito en el cielo, ¿cómo iban a permitir que una eminencia como el doctor
Prieto, dejase ese hospital?
Los más jóvenes, habían oído hablar mucho y bien de un neurocirujano
joven, con mucha proyección, que estaba en dicho hospital y según su
información, estaba no demasiado a gusto, ya que él, quería realizar las
intervenciones con nuevas técnicas
quirúrgicas, que se estaban implantando con éxito en todo el mundo, pero el
jefe de servicio, no le permitía ninguna innovación.
Debido a la amistad que unía a algunos componentes
de la junta directiva del Santa Eufemia, con el consejero de sanidad y teniendo
en cuenta sus deseos de tener al doctor prieto, seguro que con una sola
reunión, lograrían el intercambio.
Los anquilosados y apoltronados en sus
puestos de mando, estaban en minoría, por lo que la votación salió ampliamente
favorable para establecer contactos para el cambio, esa misma tarde se
comunicaron telefónicamente con los miembros de más peso institucional, estábamos a fin de mes, el consejero, movió
los hilos en el fin de semana, y el martes, día uno ya estaba cada cual en su
nuevo destino, el doctor Waldo Méndez, se uniría de inmediato al equipo y se daría
la posibilidad de volver a formar parte del mismo al doctor Andreu, sin
protagonismos, la decisión sería suya.
El equipo de la doctora Santos, había
estado trabajando a marchas forzadas, lo habían conseguido. Antes que a nadie, debía mostrarle su
funcionamiento a Francisco; un poco antes de la hora de la comida:
.-mira que bien, la doctora
Santos
.-buenos días, ¿qué tal el finde?
.-muy bien, todas las tardes con
mis padres y mi hermano, incluso el domingo, se subieron unas cosas de la cafetería
y comieron ahí en la sala de visitas al mismo tiempo que yo
.- ¿habrás hecho ejercicios por la mañana?
.-como para no hacerlos, según es
Miguel
.-yo vengo a enseñarte un invento, a ver,
te explico:
Esto que parece una pila de botón, es
lo que quiero poner como parte del hueso en la operación, es un dispositivo que
tiene cuatro puntos de presión, que se activan desde el exterior, así
localizarnos el punto exacto donde la presión causaba las crisis.
.-lo siento no entiendo nada
.- coge el botón por el canto con dos
dedos
.- ¿así?
.-si, ahora míralo detenidamente, ¿Qué ves?
.-nada
.- ¿no ves como cuatro puntitos?
.-a si, parecen cabezas de
alfiler
.- bien ahora lo voy a conectar, imagínate
que ya está en tu cráneo. Voy a activar
uno de esos puntitos
.-se mueve
.-claro, independientemente, puedo mover
cada uno de los cuatro, así presionaremos distintos puntos para saber qué
efecto causa cada una de las presiones
.-o sea, que luego, me tendrán
que operar otra vez para quitármelo
.-no, míralo por la parte de atrás
.-tiene como cuatro agujeritos
.-son los que anclan las cabecitas de
alfiler como tú dices, una vez terminada su función, ahí van unos micro
tornillos, que evitan su desplazamiento, el botoncito quedará como un cachito
de tu hueso
.- ¿y cómo funciona sin cables?
.-también
contiene en su interior una “pilita”, hemos calculado una duración de cien a
ciento veinticinco impulsos, luego dejará de funcionar
.- ¿y entonces? ¿para qué los
tornillos?
.-por seguridad, ante todo seguridad de
que no se van a desplazar a causa de algún golpe o algo parecido
.- ¿ves? Esto si me ha convencido
.- te digo, en la monitorización, se
vieron afectadas tres partes de tu cerebro, por lo que hemos programado
implantarte tres botoncitos, pero lo haremos un distintas fases, más o menos
cada mes
.- ¿serán tres operaciones?
.-si, a cambio te ahorraras la cantidad de
trepanaciones, para mi entender excesivas, que pretendía realizar el doctor
Prieto y por lo que se oponía a este nuevo método
.-tres operaciones con anestesia
general
.-no, ten confianza en el doctor Benítez,
es un genio, nos ha asegurado que no sentirás ningún dolor, pero permanecerás
despierto, y cuando acabe la intervención, podrás levantarte y seguir con tu
rutina diaria como si nada
.-eso me dijo después de la
prueba del dolor
.- ¿y no te diste cuenta?
.- ¿de qué’?
.-de que no tiene ni un pelo de tonto
Los dos comenzaron a reírse a carcajadas,
Andrés entró con cara de asustado
.- ¿pasa algo?
.- ¿no ves que nos estamos riendo?
.- así de golpe, me habían
parecido voces
.-es un chiste que me ha contado,
pero lo siento, forma parte de un secreto
.-pues vaya gracia, ja, ja, ja,
adiós graciosos
.- se ha mosqueado el abuelo
.-ssssss, que las paredes oyen
.-por mi parte estoy de acuerdo
.-con tranquilidad, cada paso nuevo,
intentaré explicártelo, para que entiendas el porqué, te prometo que en lo que
esté en mis manos minimizare los riesgos todo lo posible
Francisco se acercó a su oído y le
susurro:
.-estoy seguro, o mi madre
desuella vivo al doctor Fernández
.-pues conociéndola, ya lo veo sin
pellejo
Otra vez, rompieron a carcajadas,
Andrés giró la silla mirando hacia la puerta:
.-cuando yo digo que están bobos
.-hasta otro día y cuida ese buen humor
.-lo mismo digo, ya estarán a
punto de traerme la comida
.- a eso mismo voy yo
.-adiós y que aproveche
.-igualmente, chao
Después de la siesta, antes de que
llegase su familia allá a las cuatro: Abrió los ojos, los frotó con sus
puños, no era un sueño
.-que soy de verdad, aunque un poco oscuro
En los pies de la cama observándolo
atentamente se hallaba el doctor Fernández junto al doctor Méndez
.-Francisco, este es el doctor Waldo
Méndez, el nuevo neurocirujano del equipo
.-llamarme simplemente Waldo; este señor y
yo, nos vamos a llevar bien, sin duda
.- ¿usted, no es de aquí?
.- no, pero como si lo fuera, llevo acá
dos años, y con lo que me pagan, aun no he logrado adquirir el billete de
vuelta
.-entonces como yo, que no tengo
para el autobús, para volver a casa
.- mañana platicaré con el doctor Andreu y
la doctora Santos, para concertar un día de esta semana, para la intervención
.- ¿con el doctor Andreu?
.-si, él, tuvo el gesto de mantener
su compromiso escrito, de operarte en el plazo de una semana
.- ¿y el doctor prieto?
.-lo hemos cambiado por el doctor
Méndez
.-me alegro, creo que ha sido un gran acierto
.-en estos días, nos vemos
.-adiós
.-levanta, que va a llegar tu
familia.
Efectivamente, a las cinco en punto,
llegaban sus padres con su hermano; ya
lo hacían como un ritual, en primer lugar la madre, después su padre y por
ultimo Luis, unían sus manos con las palmas abiertas y se daban un beso, cada
día al llegar.
.-hoy me ha enseñado la doctora,
el botoncito que me van a implantar y me ha enseñado como funciona.
Continuó, explicándoles los detalles, como
y de que se habían reído, de la tranquilidad que le habían trasmitido las
palabras con respecto a la seguridad, para evitar riesgos.
.-hace un momento se acaban de
marchar
Les comentó, como era el nuevo doctor, un
joven mulato, tenía cara de querer avanzar en este campo, parecía tener prisa
por demostrar a los demás, que nuevas técnicas eran viables, el no dijo nada,
pero su cara lo gritaba; estaba convencido de que Waldo y él, serían buenos
amigos.
.-se que la operación, se hará esta semana, el
Doctor prieto se comprometió por escrito y quiere cumplir con lo acordado.
Como cada tarde llegó la hora de volver a
casa, sin embargo para marchar, el ritual, tan solo lo hacía su madre.
.-hijo, duerme y come bien
.-que como bien todos los días
.-ya le diré a Isa que te controle, ¿Cómo
me entere de que te dejas algo en el plato?
.-uuuh, que miedo
.-no te rías de mí, que paso pá dentro, y
cobras
.- hasta mañana tontifarria y
cuídate
.-adiós, acuéstate pronto
.-sobre las once os llamo antes
de que os vayáis a la cama
.-ala, me voy, espero tu llamada.
Como cada noche, cenaba pronto, y se ponía
a leer lo que la gente había dicho en facebook; él nunca escribía nada, se
limitaba a leer lo que sus amigos del barrio, se inventaban de lo que estaban
haciendo con Paco el loco. Imbéciles,
no tenían ni idea, no iba a contestar frases que no tenían sentido, ya llegaría
la hora de poner las cartas boca arriba.
A la mañana siguiente, su madre fue al
mercado, al acercarse a la carnicería, se formó un corrillo en una esquina del
mostrador, ya estaba harta de tanta tontería.
.- ¿qué pasa cotorras? ¿no tenéis otra
cosa que hacer?
.- oiga señora que estamos
hablando
.-ya lo veo, y me imagino de qué
.- pues sí, el otro día vieron a su
hijo por el barrio, y al día siguiente lo tuvieron que volver a ingresar, ¿que
pasaría en casa? vaya familia
.- más vale que te preocupes de la tuya. Medio
kilo de filetes de lomo y un par de carrilladas
.-vaya madre, y encima está tan
contenta
.-pues si mucho, porque en unos días lo
operan para quitarle un tumor y hacerle un implante; ala pedorras, para que
tengáis de que hablar.
.-ya ves como si nos importase
.- haber si se os seca la lengua y os la
tienen que cortar. Cóbrese. Ya podéis hablar en voz alta víboras, que me
voy.
Se marchó más ancha que larga, que a
gusto se había quedado.
La sesión matinal de gimnasia, fue
interrumpida por los doctores Méndez, Andreu y Santos.
.-perdonar que os molestemos
.-Francisco túmbate un momento en la
cama, Miguel, déjanos un momento a solas
Se situaron en la parte posterior de la cabecera,
el colchón parecía como que se desinflaba, adaptándose al contorno de su
cuerpo, quedó totalmente engullido; la
cabeza permanecía sobre una estructura rígida, la cama comenzó a girarse.
.-tranquilo que no te vas a caer
.-esta, sería la posición correcta
.- ahora colocaremos los anclajes
de sujeción
.- ¿pero el hueco es mínimo?
.-a eso me refería yo, si ponemos
unas extensiones laterales, con ventosas, podremos levantar una parte del cuero
cabelludo, después volverlo a coser y la cicatriz quedara oculta
.- ¿y luego para poner los tornillos?
.-le dejaremos ya puestos unos aros, y luego
será cuestión de sustituirlos, el tornillo y todo lo demás quedará oculto
.- es decir, que con esto solo se pretende
evitar las cicatrices
.- ¿le parece poco?
.-no todo lo contrario, psicológicamente,
el paciente se ve mucho menos afectado
.-calculando es sitio exacto de la
punción, no dejaría huellas
.- pero, es una carga excesiva de
agresividad y el paciente, estaría en una posición fija, no va a responder
igual, que si está actuando cotidianamente
.-habrá que avisarle el doctor Benítez, el área de la anestesia será
superior
.-yo me encargo de comentárselo
.- mañana tengo preparados los nuevos anclajes
.-Francisco, ya te puedes levantar
Según se incorporó, el
colchón, volvió a su estado normal, pusieron la cama recta y se fueron; al
momento volvió a entrar Miguel, para continuar con los ejercicios.
Por la tarde, cuando llegó su familia, les
rogaron se dirigiesen al despacho del director, al día siguiente, se cancelaría
la visita, por la tarde se realizaría la intervención.
No hay comentarios:
Publicar un comentario