Esta tarde, a las 21.00h, he sintonizado
esta emisora por medio de internet.
Para mi sorpresa, se estaba emitiendo un
reportaje, sobre una tribu, enclavada en la jungla donde se venera como dios al
cocodrilo.
Después de buscar, en otros enlaces donde
hubiera imagen, he desistido, pero me he quedado escuchando expectante.
El resultado ha sido emocionante. Debido
a que nos estamos acostumbrando a no pensar, que nos den todo mascado y
digerido, la vista capta en la pantalla, colores y movimientos que envían a
nuestro cerebro todo eso, aquello que simplemente vemos, anulando el trasfondo
que se oculta tras las palabras (a cuales,
muchas veces ni tan siquiera prestamos atención).
Los silencios del narrador, de varios
segundos, que podrían parecer interminables, eran imprescindibles, sí, daban paso
a todo un escenario imaginativo, provocado por la combinación de sonidos de
fondo producidos en aquel entorno.
Por fin he podido darme cuenta, de esos consejos
que tantas veces me ha dado me hermano Ferdinandus.
Algo que creía había llegado a comprender,
pero creo en realidad, no había pretendido asimilar de esta forma concreta.
Hoy creo, empiezo a concebir el sentido que
quiero plasmar en mis escritos, eso que echaba de menos en ellos… la narrativa descriptiva de lugares y hechos.
Algo
que sitúe mejor al lector y lo transporte a lugares que solo existen en mi
mente, para que mis personajes, con su personalidad familiar y lugar donde
habitan sean más reconocibles.
Cada día tenemos en nuestro entorno algo de
lo que aprender…
Un nuevo tono de color esperando ser
visto.
Un sonido fugaz, que pretende ser oído.
Un aroma dulzón, adulando nuestra
pituitaria.
Una leve brisa, anhelando ser tocada.
Un nuevo manjar, para ser paladeado.
Pero además,
ahí, justo ahí, en un rinconcito de nuestro cerebro, ahí, escondido en nuestra
mente, agazapado en cuclillas, espera lo más importante…
Algo, no sé…. esperando a ser pensado.
Y… en el poderoso inmenso todo, rebuscamos para no encontrar nada.
Cuando en una
insignificante partícula de la tal
llamada nada… se encuentra encerrado el
todo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario