Espérame,
ahora voy.
Vete abriendo
la cama y doblando el edredón.
Tan solo unos minutos son suficientes
para desmaquillarme, quitarme la ropa en el cuarto de baño y asearme dignamente,
como él se merece.
Luego una gotita del perfume suave que
tanto le gusta detrás de los lóbulos y ya está.
Hoy es la noche de nuestro 25
aniversario.
Me pongo esa ropa interior que le encanta
y la haremos inolvidable.
.- cariño cierra los ojos. – un, dos,
tres, ya los puedes abrir.
Que tonta soy. No los abre. Se ha quedado dormido.
Pobrecito, estará reventado del
trabajo. Bueno, lo despertaré con mis
caricias.
Si es que soy imbécil. Ahora se pone a
roncar.
En fin, será que he envejecido y ya solo le
gusta verme vestida y maquillada.
A tomar
por saco la sabana y la manta. Ahí te
quedas con el culo al aire, que yo me bajo al sofá a echarme un cigarro, porque
si me quedo aquí al final te voy a dar un guantazo en sueños.
(Me levanto. Lo miro. Me río)
.- pero donde quedó aquel mocetón. Vaya barriga
cervecera que has echado majo.
Al final, fue una gran decisión el no dejar
de fumar.
Fdo.-
Ojos de Gata
Jajajajajaja...Me causó gracia esta historia porque a muchas nos pasó eso alguna vez, donde nos preparamos para una noche de despliegue amoroso, y cuando llegamos para sorprenderlo a él, ya está roncando. Al otro día nos echan la culpa que nos demoramos mucho en el cuarto de baño, y con él, la pasión se durmió jajajaja.
ResponderEliminarAmerica Santiago.
Pretendo que Ojos de Gata, diga las cosas como son ( bueno como yo creo que ella cree que son)y nadie la calle, aunque ciertas cosas puedan crear risas o enfados.
EliminarGracias ABU.