Ayer pedí a Claudia
(quien me regalo un dibujo y prestó otro) que me hiciese uno, partiendo de una
foto de mi hija Raquel.
Dejaba a su libre interpretación el concepto. Le podía poner un pirsin, diadema, collares,
incluso cuernos, me daba igual. mi intención era hacer un cuadro, para ponerlo
en su habitación y utilizar también el dibujo como retrato de Angélica. Así es como ella la ve y así os la muestro.
Mi agradecimiento a Claudia, con la boca y los ojos de mi hija, me ha hecho ver como podría ser en estos momentos de no pasar lo que pasó.
ResponderEliminarde todas formas, mi angel es presioso y está a mi lado.