No te vayas.
Quédate
un poco más.
Que te cuesta.
Tanto tiempo juntos ¿y ahora?
¿Qué voy hacer sin ti?
¿Y tú? ¿Dónde vas a estar mejor?
No te enfades
con mi corazón.
Y la luna, quiso robarme el aliento
para hacerse
un brazalete
de brillantes
que lucir.
Quedarse con mi mirada
para iluminar
la noche.
con las yemas de mis dedos
para esparcir
melodías,
y la musa de
mi pluma
soñando hacer
poesía.
Y las estrellas, mis besos.
Y el sol, quiso mis abrazos.
Y el mar, ahogar en sus olas
mi alma hecha
pedazos.
Un volcán, mis pensamientos
y una cueva mi
tristeza.
La noche mí soledad,
y el día con
la nobleza.
Pero al ver que todos, todos,
querían mis
posesiones
ella me volvió
a abrazar.
La vida ya no se me iba,
no me quería
dejar.
Se dio cuenta, que ahí al lado,
a la vuelta de
la esquina,
mi cariño iba
a extrañar.
Y aquí seguimos riñendo
por no saber
lo que hacer.
Dejando pasar el tiempo
pensando en lo
que ha de ser,
el día en que
nos separemos
y no nos
podamos ver.
Ay vida… tanto a mi lado,
que me
aprendiste a querer.
Carlos Torrijos
C.a.r.l. (España)