viernes, 31 de mayo de 2013

El Coballa, con (LL) parte:4


 

      El día de más dolor poco a poco se iba convirtiendo en el más feliz de los últimos años;   la impaciencia se lo comía por dentro,  esperando la hora de ver a su hermano, incluso su nerviosismo, le hacía soltar alguna que otra lagrima, eso sí de ilusión y alegría, ya se acabó el llorar de impotencia y rabia.
         Llegaron las cinco, abrió las cortinas todo lo que daban de sí; al poco se oyó, como un clic en los altavoces, su hermano entró y se paró frente al cristal.
    Las palmas de sus manos abiertas, se unieron, y un beso dejo cubierto de vahó, los dos lados con la forma recortada de los labios en el centro.
    .-alá, que chulada, nada que ver con tu habitación
.- ¿te gusta?
    .- no me la imaginaba así, pensaba que era una como las del clínico
.- además tengo de todo, por cierto tienes que instalar en casa el Skipe, para podernos ver por videoconferencia a cualquier hora
   .- ¿qué pasa con la operación?
.- nada, es una bobada, quitarme el tumor y ya está, mira que le he dicho veces a los médicos que me hicieran un escáner
    .- bueno ya está hecho. ¿tienes que llevar todos esos cables siempre?
.- claro, pero no te puedes imaginar, ni lo notas
    .- no sé, no sé,
.- ¿como esta madre?
      .- mal, para que te voy a engañar, la gente habla, ya sabes, que si has vuelto a la cárcel, que si van a experimentar con tigo como un mono; en fin que la pobre está deshecha
.- dile que venga y que vea como se portan con migo aquí, que me tienen a cuerpo de rey.  Toda la vida pasando vergüenza por tener un hijo loco,  pues ahora voy hacer, que se sienta orgullosa, van a ser unos meses, pero merece la pena.
    .- a ella le da igual, lo que quiere es que estés a su lado
.-pues que venga, a la hora que quiera, que la van a acoger todos con los brazos abiertos.
      Mientras tanto, Andrea intentaba localizar al director por teléfono.   .- Luis, se terminó la visita, órdenes del director.
.-no. me jodas,  Andrea.
   .- no pasa nada, mañana vuelvo y ya está.
.- me cago en la ostia, todo el día tocando los huevos
   .- venga hasta mañana (resignado)
    Él, con aire de mosqueo.- hasta mañana, que os den.
         Corrió las cortinas con furia, se echó en la cama y empezó a jurar en arameo, dejando caer santos del cielo de dos en dos.
      A los cinco minutos, tiempo suficiente para que ya no quedasen santos y vírgenes que nombrar, se iluminó la luz verde, al entrar Andrea:
.- ¿qué quieres ahora?
   .-quieto fiera, que tienes muy mala leche
.- ¿y cuál quieres que tenga?
   .-me parece a mí, que te estamos mimando demasiado
.-sí, de cojones
     .-esa boca, cuenta que esto es una excepción, que no te voy a volver a consentir.
.-bueno perdona mi vocabulario, pero…
   .- Luis, ya puedes pasar
.-gracias, gracias,
    .- ¿ahora si me quieres verdad?
.- mucho, mucho, lo siento, de verdad
   .- menos copla y disfruta de la compañía.
      (Luis) .- no me extraña ya nada, te quieren todos más, que te han querido nunca en el barrio, todos los que me han estado cambiando y preparándome para entrar, bueno,  no te puedes ni imaginar y yo como si fuese uno más, solo por ser tu hermano.
.- ven, ya verás.  Esta pantalla sirve para todo, pero alucina, me tumbo en la cama y ella sola donde yo vaya, me sigue, así la puedo ver desde cualquier posición.   Con este mando manejo todo y el teclado y ratón, me los puedo llevar donde más cómodo esté
    .- ¿y esto de aquí?
.- todo tipo de accesorios para los juegos: joystick, volante con machas, de todo, incluso está instalado ese que no hacen falta mandos, que se juega con tus movimientos
    .- ¿y todo eso?
.- para estar en forma, puedo utilizar lo que quiera, incluso tengo un rehabilitador, Miguel, que me va a ayudar con los ejercicios
    .-me alegro mucho de haber venido
.- la pena es que no esté aquí madre
    .-todo llegará
.- bueno tal vez, hacen otra excepción
    .- ya, pero entiéndelo si no es así
.- me esforzaré por entenderlo, hay normas que no se deben saltar, pero también intentaré ganármelo, para que se las salten
    .- yo se que madre y padre, no van a venir mañana ni pasado, pero ten paciencia, deja que lo vayan asimilando, ya intentaré yo que se pongan al teléfono cuando llames
.-bueno o por video
    .- no, si te ven con tanto cable, se van a asustar, por favor, déjame que yo poco a poco se lo vaya explicando.
        Y allí, pasaron toda la tarde, hablando y riéndose de las cosas que hacían cuando eran pequeños;   no les dio tiempo ni para probar ningún aparato de gimnasia o encender el ordenador.
        .- Chicos, la hora de despedirse
     Se fundieron en un abrazo.- hasta mañana
.- eso espero, no me falles
   .-no fallaré
.-ah, antes de irte, a la gente, de esto nada
   .-no te preocupes, se guardar los secretos
.-entiéndelo
   .- que lo entiendo, no te preocupes
.- adiós
   .-adiós, este es mi hermano pequeño.
      Un señor, alto, delgaducho y con gafas, accedió a la habitación, no le pegaba nada el uniforme de color naranja, parecía uno de los de Guantánamo.
     .- buenas noches
.-muy buenas, otro nuevo
     .- ya ves, esta noche me toca a mí vigilar tus sueños
.- yo soy Francisco y usted
    .- llámame de tu, que aún soy un crio
.- ¿un crio?
    .-sí, soy Jaime, he cumplido el mes pasado cincuenta y nueve más uno, pero ten en cuenta una cosa: cuando dejes de ser niño, empezarás a ser mayor, a si que…
.-tienes razón, estás hecho un chaval
    .- lo que yo digo, ¿Dónde te dejo la bandeja?
.-ahí mismo, ya luego veré donde me apetece cenar
    .-no quiero que quede nada eh, que yo mosqueado tengo muy malas pulgas
.-a sus órdenes, me comeré todo   
      Buscó una peli, y se acomodó como la noche anterior, una vez terminada la cena, se estaba aburriendo, por lo que encendió el ordenador y desde la cama, se puso a mirar lo que habían puesto de nuevo en facebook, amplió la pantalla al ciento cincuenta, que gozada, pasaba de escribir nada de momento, solo tumbado con el ratón en la mano derecha, moviéndolo sobre la sábana, se le pasó volando el tiempo.
     Justo estaba viendo una fotografía de una chica en biquini que había subido un amigo, cuando llegó Jaime.
     .-chaval, que ¿has cenado todo?
.-todo como mi sargento dijo
    .-así me gusta, y ten cuidado con lo que ves, que luego sueñas y en los monitores no nos dejan ver porno
.-venga ya, más quisierais ser capaces de ver los sueños, eso sí que sería todo un avance de la medicina
   .-bueno, tu por si acaso cuidado con lo que sueñas, que se te altera el corazón, otras partes y empiezan a saltar alarmas
.- mira en eso, puedes tener razón
    .- a dormir, que es tarde
.-vale hasta mañana, a ver, si puede ser que no me quede sin desayuno otro día
    .-aquí, nunca se sabe, tu por si las moscas, acostúmbrate a cenar bien
.- me está empezando a entrar la modorra
    .- pues adiós, ah, no te preocupes, si te quedas dormido ya te apago yo todo desde allí, pero no te acostumbres.
.-chao.

 

jueves, 30 de mayo de 2013

El coballa, con (LL) parte:3


 
       Sonó el teléfono.
  .- ¿sí?
       .- arriba dormilón, que son las siete y media
.- vale, vale,
       .- directo al aseo,
.- ahora voy
                Volvió sonar  a los dos minutos.
       .- te has vuelto a tumbar
.- no
       .- listillo, que te estoy viendo
.- qué asco de cámaras
         .-esto es lo malo, pero ya te acostumbrarás, imagínate que es como un gran hermano, pero no te dejan nominar.
  .- que risa me da
       .- acostúmbrate a no disimular, a los sensores no los vas a engañar.
.- eso, dame ánimos
      .- que te laves la cara de una vez, cuelga y arreando
               Según se estaba duchando, de pronto:
      .- ¿cómo va la cosa?
.- ¿qué coño pasa ahora?
       .- tranquilo, también hay instalados altavoces y micros
.- Joder, que estoy en pelotas
          .-a mí, me da igual
.- eres un poco cabroncete ¿no?
        .- si, ¿pero? ¿a que soy gracioso?
.- vete a la mierda
              Justo acababa de secarse cuando entraron la doctora Elvira y Miguel, con cara de cachondeo.
 .- ¿Qué os hace tanta gracia? 
              La doctora cogió el mazo de cables.
        .-quítate la toalla y ponte aquí de pie, que empezamos.
              El mismo procedimiento que el primer día, colocando y comprobando uno por uno, todos los sensores.   Cuando ya estaba terminando de ajustarlos para evitar molestias:
        .- ¿te cuento un secreto?
.- vale
       .- llevo con Miguel, desde las siete y veinte, por eso nos reíamos
 .-que me estaba duchando,
            .- ya, ¿y qué?; ahora estoy colocándote esto y llevas la misma ropa.
          Se puso colorado como un tomate, todos los monitores empezaron a cambiar sus curvas de frecuencia estrepitosamente.
           .- Tranquilo.  Hijo mío; si yo ya estoy a punto de cumplir   los setenta, que no me voy a asustar,
.- poco a poco, me tendré que acostumbrar.
             Sus pulsaciones fueron volviendo a la normalidad.
       .- bueno nos vamos, otro día que te quedas sin desayunar.
 .- ¿y eso?
           .- una prueba que te tiene que realizar el doctor Benítez,
.- pues hasta que llegue, le echaré un ojo al facebook,
          .- si, mejor dejamos la gimnasia para mañana, que hoy estés descansado.
                  Allá a eso de las once, una mujer vestida de azul, algo frondosa, tras ella, un joven doctor con la cabeza rapada.
         .- buenos días,
.- buenos días,
         .- Soy el doctor Benítez, anestesista, (al tiempo que le alargaba el brazo para estrecharle la mano)
.- encantado
         .-  y ella es Isa, una auxiliar del equipo (él se aproximó para darle la mano)
                  .- a mi dame dos besos que soy una chica, aunque casada, (los tres se rieron de lo apostillado)
         El doctor tomó la palabra.
     .- vamos a sentarnos un momento, como solo hay una silla y un sillón, yo me sentaré en la cama.   Ahora presta atención; te vamos a realizar una prueba, como todo tiene una cosa mala y otra buena; primero la mala:   Es la prueba más dolorosa, que te vamos a efectuar, consiste en descubrir mediante la información de tu cerebro, donde están los valores del dolor, desde el más tenue, al más intenso, rozando incluso el umbral.   No pongas esa cara de susto, que ahora viene la buena:     Al tener todos los datos informatizados, en cada prueba posterior, incluso en tu operación, no sentirás más que un pequeño cosquilleo, y al terminar, podrás seguir con una actividad normal, como la de cualquier día, aunque ahora tengas un nudo en el estomago, para cualquier paciente, esto sería todo un lujo. 
 .- no si entenderlo, lo entiendo, pero entiéndalo usted, así en frio y a la primera de cambio.
        En ese momento, Isa, se levantó de la silla y se acercó para abrazarlo,
           .- como diría tu madre: hijo, esto me va a doler más a mí que a ti, pero tengo que hacerlo,
 .- me parece a mí, que aquí sois todos muy graciosos
       .- vamos, contra antes empecemos antes acabamos.  Túmbate en la cama y estate tranquilo, para no provocar más dolor del necesario, te vamos a inmovilizar con correas brazos y piernas, luego vamos a vendar tus ojos, para que tu cerebro emita una señal limpia, sin que esta, esté interferida por el miedo, nosotros no hablaremos, todo será por señas, tú no te cortes, grita, desahógate como quieras, digas lo que digas, lo asumiremos con tranquilidad. ¿Vamos con un par?
.-habrá que ir, que remedio.   ¿Ya?
       .- ya, túmbate y empezamos.
             El doctor se sentó en la mesa e introdujo una clave en el ordenador;  mientras Isa, inmovilizaba a Francisco, en la pantalla, todas las barras, iban moviéndose entre los distintos tonos de color, hasta situarse todas en el verde más denso, cero absoluto, era un analizador de espectros, con una calibración de +/-64, con un movimiento imperceptible, si no fuera por el gran tamaño del monitor.
         Comenzaron con un simple pinchazo, con una aguja en el muslo; dependiendo de qué acción, se iba cambiando la calibración de las barras, ajustándolas a la más idónea.
         Pasados diez minutos, Francisco pidió, que por favor le metiesen algo en la boca, para poder morder, Isa, agarró un tubo de goma, que tenía a mano y se lo puso entre los dientes.   Prosiguieron durante otra, media hora; en cada punzada, se miraban extrañados del aguante, esperando que en cualquier momento, escupiese el tubo y se pusiese a lanzar improperios;   no sucedió así, hasta después de estar desatado, no soltó sus fauces.
.- ¿qué? ¿Estaréis contentos?
         .- Más bien sorprendidos
      Entonces soltó toda la rabia contenida y comenzó a llorar, para desahogar la tensión.   Con lagrimas en los ojos, Isa, lo cogió entre sus brazos.
        .- llora todo lo que quieras, hasta que te canses; llora mi niño.
                Después de un rato, respiró hondo, dejó caer los brazos de la espalda de Isa.
 .- ya, ya ha pasado
      .- Francisco, no sé qué pensar, cada día nos sorprendes más, no te entiendo, lo siento,
 .- para entenderme, tendría usted que haber vivido en mi barrio, todo este tiempo siendo la burla de todos, incluso de los amigos;  mira ahí va Paco el loco, eso sí es duro, aquí por primera vez soy algo y si cualquier Paquito el loco de niño puede dejar de serlo, es bastante.
     .- perdona mi desconocimiento, creo que aquí, con tigo, vamos a aprender más de lo que esperábamos.  Gracias.
 .- espero que la prueba haya salido bien, 
      .- ha sido perfecta, vete pensando que te apetece hoy de comer, que vamos a buscarlo donde haga falta.
            Cuando quedó solo, el pensar en que le apetecía comer, le hizo olvidarse del malestar que le quedaba en el cuerpo, después de aguantar tanto dolor, se sentó en el ordenador y empezó a buscar platos difíciles de encontrar, le daba igual, aunque su sabor no le gustase, ahora le tocaba a él tocar los huevos.
         Había platos que eran tan extraños como repugnantes,  ya empezaba a tener hambre y de repente pensó: ¿pero realmente, que me apetece?
        Sabiendo de la existencia de los micrófonos dio una voz: ¿puede venir un auxiliar un momento?
      Pasados unos minutos, en la sala contigua (de visitas) apareció Andrés, un señor de pelo blanco al que conocía de las visitas anteriores a su ingreso.
     .-hola, ¿necesitas algo?
.-si, ya tengo pensado que quiero comer hoy
     .- tú dirás
            De pronto se le soltó una carcajada
.- ¿a quién se le ha ocurrido la idea de vestirte de rosa?
      .- caya, caya, que vaya cruz me ha caído, con el dichoso uniforme
.-perdona no lo he podido evitar
      .- perdonado y ¿de lo de la comida?
.-a sí.  Mandad a alguien a mi casa y que me traiga un plato de lo que haya cocinado mi madre hoy, eso, eso quiero comer.
        .- ahora mismo salen para ya.   Llámalos, que sepan que vamos, no nos den con la puerta en las narices.
.- me gustaría que me lo trajese mi madre, pero eso no va a ocurrir
        .-tranquilo, todo se andará.
.- ahora llamo, hasta luego
         .-adiós.
               Estaba de espaldas, cuando un poco antes de las tres, se abrió la puerta, enseguida supo que era Andrea, por su pequeño cuerpo cubierto de color morado.
.-Hola Andrea
     .- que pasa ruiseñor, aquí te traigo la comida
 .- Gracias por ir a mi casa
       .- que sepas que he aprovechado para hablar con tu hermano, y esta tarde viene
.- eso sí que es una alegría
            .- pues nada a comer, anda que yo me pensaba que nos ibas a mandar a por percebes, ja, ja, pero seguro que esto te gusta más.
              Fue irse, sentarse en la silla y disponerse a levantar la tapadera; Garbanzos con arroz, y unas alas fritas de segundo. Cada cucharada la saboreaba como el mejor manjar, era cono estar recibiendo un beso de su madre en cada grano de arroz y un abrazo cada vez que tragaba un garbanzo.
         Ahora sí que lo tengo claro, voy a llegar hasta el final, aunque ellos no lo entiendan, no por mí, quiero que cuando esto termine se sientan orgullosos de ser mi familia y de que una vez por todas, en el barrio los miren con envidia, no con pena por tener un hijo loco.

miércoles, 29 de mayo de 2013

El coballa, con (LL) parte:2


             De vuelta, ya en la habitación, con Elvira:
    .- ¿estás nervioso?
       .- puf, muchísimo más que ayer con ser el primer día y desconocer todo esto.
    (Riéndose).- pues hasta mañana no te conectaremos de nuevo, o sacaras de quicio a los programadores;  ahora mismo te traen la comida, que estarás muerto de hambre, desde ayer sin probar bocado y perdona, pero era necesario.
           .- no hay nada que perdonar, lo primero es la causa por la que nos encontramos aquí.
       (Esa misma tarde, la ingeniero de prótesis, se puso manos a la obra en el diseño de un mecanismo que se le había pasado por la cabeza durante la reunión).
       Después de la siesta, toda su alegría, se tornaba en decepción, a medida que pasaban las horas; nadie había venido a visitarlo, ni su hermano, toda la tarde sentado frente a aquel cristal, con las cortinas abiertas y en la sala contigua, solo unas sillas vacías.  En el último instante, poco antes de la hora de cenar, tras el cristal una enfermera vestida de morado claro:
    .-Hola Francisco, soy Andrea,
           Se levantó y se acerco tímidamente,
         .- hola.
    .- ¿qué? ¿Esperando visita?
        .- sí, pero no ha venido nadie,
   .- lo sé, me ha tocado estar toda la tarde vigilando los monitores, entre que estás desconectado y tú, toda la tarde estático, jolín que aburrimiento, tío, no me has parecido nada divertido,
      .- y a ti, ¿quién te ha dicho que la sea?
  .-la compañera que estuvo ayer,
      .- ah sí, ayer me lo pasé genial, pero hoy...
  .- no te preocupes, que no es algo sencillo de digerir para unos familiares que no lo aprueban,
      .-ya, pero hoy tenía una buena noticia que darles,
  .-pero ellos no lo saben, ¿porqué no los llamas?
       .-me han dicho que no puedo contar nada,
  .- nada de lo que concierne, a qué tipo de pruebas se te realizan dentro del programa, pero el escáner de esta mañana no estaba dentro de los ensayos programados;     además, igual que  lo estoy viendo yo, esto lo puede ver todo aquel que venga a visitarte, aunque te pedirán que no abras las cortinas de par en par, a no ser, que sea alguna visita de plena confianza, tampoco es conveniente que lo vea todo el mundo.
      .- entonces ¿no pasa nada?
  .- haber, todo en su justa medida;  tienes teléfono, internet, webcam, ¿que están? ¿de adorno?   Vamos, descuelga ahora mismo el teléfono, marca el número de tu casa y dale a tu familia la buena noticia, Tal vez, ahora todavía entiendan menos la decisión de seguir aquí, pero tienen que saberlo, y diles que vengan a verte, (con una gran sonrisa) que aquí todavía no nos hemos comido a nadie.
       Andrea, se disponía a marcharse; justo al abrir la puerta, se giró y gritó: .- Ya, hazlo ya.
     .-Coño, que susto me ha pegado la pequeñaja.
          Se dirigió a la mesa, cogió el teléfono y se sentó en la cama antes de marcar,  acercaba los dedos lentamente a los números, de uno en uno, pensando si hacerlo o no, una vez marcado el ultimo, esperó un momento y pulsó decididamente el botón verde le llamar.
     .----- .---- .----- .- ¿Diga?,
         .-Luis,
    .- si ¿quién es?
         .- ¿como que quien soy?
    .- perdona Paco, así de pronto no te había conocido, ¿qué tal?
        .- Bien ¿y vosotros?
   .- como siempre, esperando a ver si llega padre,
       .- os he estado toda la tarde esperando pero como no habéis venido ninguno.
  .-bueno tranquilo ya iremos
      .- esta mañana me han hecho una prueba
   .- ¿ya?
      .- no, no tiene nada que ver.   Ha sido un escáner
 .- ¿pero? ¿pasa algo?
      .- si y no
.-no me jodas Paco ¿qué pasa?
      .- tranquilo Luis, que te lo explico.   En el escáner han descubierto, que toda mi enfermedad se debe a un pequeño tumor que tengo en el cerebro y ....
.- ¿pero qué pasa? ¿es malo?
      .- para coño que te explico; no, no es cáncer, además me van a operar y ya está, estoy en buenas manos.
.- o sea que te operan y para casa
     .- no, esa es otra, he decidido quedarme,
 .- ¿pero? ¿para qué te vas a quedar, melón?
      .- sé, que es difícil de entender, pero por favor, ven a verme,
.- ¿tú sabes cómo esta madre?
      .- dile que me perdone, pero tú, por favor ven,
.- mañana voy.  Cuelgo que llega padre y no quiero movidas, ya mañana hablamos.
 .-----------------------
          En ese momento, se iluminó el piloto verde de la puerta de la habitación; entró un grandullón vestido de verde con una bandeja en las manos, “vaya bicho, parece un armario de cuatro puertas”.
 .- ¿dónde te pongo la cena?
         .- no sé
.- te la pongo en la mesa esta de ruedas, y así cenas donde más a gusto estés.
       .- Anda, ¿pero eso es otra mesa?
.- claro, se abre;  la típica de hospital para comer en la cama.   A partir de ahora, tendremos que llamarte señor Francisco,
      .- ¿y eso?
.- ya me he enterado de lo de esta mañana, que movida, eres la noticia de neurología en todo el hospital, o estás como una cabra, o los tienes muy bien puestos,
    .- en casa de pasta no andamos bien, pero de todas formas las palabras están para cumplirlas, 
 .- ahora, ya lo tengo claro, estás como un cencerro
        .- ¿qué le vamos a hacer?
  .- bueno Francisco, pues yo soy Miguel, el encargado de la rehabilitación y gimnasia, para que estés en forma físicamente, visto lo visto, de tu mente que se encargue otro; es broma,
         .- si me da igual; al fin y al cabo, en el barrio voy a seguir siendo Paco el loco, como toda la vida desde que yo me acuerdo,
.- venga Fran, a cenar y a acostarse pronto, que mañana empezamos de nuevo;   luego más tarde vengo a por la bandeja, y para cualquier cosa llamas al timbre, sin problemas.
         Alzó una barandilla de la cama, en la que se encontraban los controles, retiró la colcha, con el mando de la tele a mano junto a la bandeja, comenzó a reclinar el somier hasta estar cómodo, acercó la mesa y la situó a la altura de su vientre;  el menú era abundante, tenía una presentación y aroma que abría el apetito a cualquiera, ahora solo faltaba encontrar una buena película, que acabase de empezar, para hacer de esa velada todo un lujo.   En ese momento, se acordó de que tenía el canal de pago, con el acceso  activado a todas las taquillas.
        Encontró una que hacía tiempo había visto y recordaba entretenida, difícil de ver en cualquier sitio, a no ser que la tengas grabada:  Amanece que no es poco.  Entre bocado y bocado unas risas;  Cuando terminó de verla, directamente, sin retirar nada, abatió el respaldo ligeramente, quedándose un momento traspuesto.
         Al rato llegó Miguel a por la bandeja, retiró la mesa de encima de la cama con suavidad para no despertarlo.
           Con un soplido largo, abrió los ojos.
     .- me he quedado dormido
.-Ya te he visto, no quería despertarte
        .- ¿qué hora es?
.- las diez y media
      .- me voy a levantar, que si no a media noche me voy a desvelar y luego ya no me duermo
.- hombre, algo pronto es
         .- ¿Qué tal la guardia?
.- aburrida, las noches son un coñazo, pero mejor, eso quiere decir que no hay ninguna novedad.
          .- ¿Qué tienes? ¿muchos que atender?
.- no, este equipo estamos solo para ti
       .- pues quédate un rato y hechamos una partidilla a algo
.- no puedo tengo la obligación de estar en mi puesto, y si llama algún jefazo la liamos; pero podemos hacer una cosa: ¿a qué te apetece jugar?
     .- no se
.- vale escoge un juego en el ordenador y me llamas marcando #12#, ponemos la Cam y jugamos en línea.  Pero de esto chitón, lo puedo hacer hoy porque no están los sensores puestos.
         Se conectaron y estuvieron jugando a diversos juegos un buen rato.
.- vamos chato, que se ha pasado el tiempo y no me había dado cuenta, son las dos, y mañana a las ocho, llega la doctora Elvira a ponerte los cables
    .- vale y gracias
.- te llamo a las siete y media, para que te asees, más cómodamente sin nada puesto
           .-OK, hasta mañana.

martes, 28 de mayo de 2013

El Coballa, con (LL) parte:1


                             La intención de aquellos investigadores, era poder coger un cerebro humano, humano y vivo, por supuesto, les parecía que no hacía falta recurrir a la excesiva crueldad, así que no lo extraerían del sujeto, que bastante ponía de su parte, con permitir que lo utilicen para este experimento tan agresivo, en la pretensión de avanzar en el estudio de los campos que determinan las emociones irracionales, para poder paliarlas en casos neurológicamente graves y que conlleven cierto tipo de riesgo para el resto de individuos, poder extirpar ese minúsculo sector, con el fin de erradicar los síntomas extremadamente agresivos.
    Escogieron a un presidiario, hombre, joven de veinte años, cumplía su pena, asistiendo diariamente a un centro de salud mental, seguía un tratamiento, para atenuar los deseos que repetidamente y sin motivo aparente, sentía de hacer daño a los que le rodeaban, crisis que no era capaz de contralar, y que pasadas, le provocaban una amnesia temporal, que transcurría de  principio a final de dicha crisis, por lo que cualquier cosa sucedida en ese tiempo, hubiera sido realizada por él o no, la aceptaba como real, cargando sobre sus espaldas, actos delictivos, que incluso nunca había perpetrado.
     En el largo tiempo que llevaba en tratamiento, la evolución de mejoría, había sido nula, bueno, las crisis se habían distanciado en el tiempo, pero en su defecto ahora eran de mayor duración. 
     Durante todo este tiempo, siempre había solicitado un volante para que lo examinase un neurólogo; pedido, que le hiciesen algún tipo de escáner;   La siquiatra, no lo creía necesario, era un trastorno típico de personalidad y la amnesia, era provocada por una autoprotección que su cerebro iniciaba a causa de un proceso parecido al epiléptico, por lo que a los familiares se le aconsejaba, únicamente administrarle lo más rápido posible, un relajante, a una dosis bestial, que  lo sedaba durante un tiempo, pero no siempre (casi nunca) le ocurrían en casa, por lo que su madre siempre intentaba acompañarlo y siempre en su bolso, llevaba los dichosos calmantes por si fueran necesarios.  Claro, pero siempre coincidía cuando estaba liado con los amigotes, delincuentes de armas tomar, todos de igual apariencia, por su vestimenta, corte de pelo y aspecto físico, que en vez de ayudar, utilizaban la cruel situación para realizar fechorías, quedando impunes.
     Una vez, debido a la acusación, de haber propinado una paliza a un indigente, con resultado de graves lesiones, su hermano mayor, acudió con él, a un gabinete de parasicólogos, con la intención de hacer una hipnosis regresiva, pero bien porque el recuerdo se le había borrado del disco duro, o bien porque simplemente eran unos sacacuartos, no dio ningún resultado, por lo que aunque no existían indicios de su autoría, al final se cargó con el mochuelo él solo.
      Antes de comenzar con la preparación, se le informó de los riesgos que esto conllevaba, se expondría a diversas trepanaciones en distintos sitios del cráneo y cada una de ellas, sería un escalafón, superior a la anterior.  En toda la conversación, se dio por sentado, que este estudio, era experimental, por lo que no debía albergar ninguna esperanza, de que todo su sufrimiento, sirviera para paliar su estado; a pesar de lo cual y la no aprobación de su familia, accedió sin dudarlo un momento.
            La suerte estaba echada, no había marcha atrás, por mucho que sus familiares, intentasen evitarlo, los documentos por triplicado de consentimiento, firmados, sellados y registrados legalmente.  La fecha de ingreso, se la comunicarían en breve.
    A los pocos días, recibió la llamada, debía ingresar en el centro hospitalario al día siguiente por la mañana; Al llegar, lo esperaba una doctora, cuya misión era, explicarle todo paso a paso.  Se procedió a un rasurado total de su cuerpo, antes de someterse a un proceso de esterilización. A través de una pequeña puerta, se accedía a un pequeño pasillo, donde se mantuvieron parados unos segundos, hasta que la luz verde se iluminó, otra puerta se abrió automáticamente.  Cuando entró en la habitación habilitada para dicho fin, se le abrieron los ojos como platos, aquello parecía una nave espacial.  El techo estaba lleno de carriles con anclajes móviles, que permitían desplazar en cualquier dirección, una serie de cables unidos entre sí, que colgaban de ellos, en cuyos extremos, se hallaban, una especie de redecilla con sensores y  gran cantidad de ventosas;  su misión era la de tener monitorizado en todo momento, tanto la actividad cerebral, como todas sus constantes vitales: pulsaciones, respiración, presión arterial, etc.
               A mano izquierda en el centro, una cama, en la prueba pudo ver, como se desplazaba en todas direcciones, e inclinaba hacia los lados hasta quedar casi vertical.  A la altura de la cabecera, a ambos lados, dos grandes ordenadores, con varios monitores direccionales, para que pudiesen ser vistos desde cualquier punto.  Detrás un gran espacio, era un quirófano adaptado, con las paredes llenas de todo tipo de herramientas  y material quirúrgico.
      A mano derecha, todo tipo de ingeniosos aparatos de gimnasia, con el fin de mantener la actividad muscular en perfecto estado y un cuarto de aseo, protegido por dos mamparas de cristal, junto a ellas una gran pantalla de televisión y bajo ella, una mesa pequeña, con un teclado, ratón, mandos y todo tipo de accesorios para juegos.
     En frente tras unas cortinas, se ocultaba una gran cristalera, que daba a una sala contigua, donde podían estar todas las tardes, aquellas visitas que desearan verlo y charlar con él.
     Al momento, llegaron el resto de doctores, acompañados de unos cuantos auxiliares, cada uno, llevaba el uniforme de un color;  aunque esto no se lo explicasen, cada uno de ellos, tenía la función de alterar premeditadamente su estado emocional, dependiendo de los criterios que la investigación necesitase, desde mantenerlo tranquilo con un trato afable;  hasta irritarlo, para llegar a los limites de mayor agresividad.
     Le mandaron quitar el pijama, le pusieron un collar, donde iban sujetos todos los dispositivos y procedieron a ponerle primero el casquete y después el resto de sensores por todo el cuerpo, de la cabeza a los pies, se sujetaban con una especie de velcro muy fino, parecía una segunda piel.  Una vez todo conectado, parecía un robot, se puso de nuevo el pijama y se empezó a mover por la habitación;   que sensación más extraña, tenía total libertad de movimientos, lo único que le molestaba un poco era el collarín;  se acercó un instante la doctora y se lo giró nada, un milímetro, fue tal el cambio, que creyó que se lo habían retirado del cuello.
        .-Ahora, te dejamos solo, considérate en tu casa, haz y toca lo que quieras, aquí, tú, eres el dueño de todo, y si enredas en algo que no debieras, no te preocupes, todo está automatizado.  Para cualquier duda, solo tienes que llamar al timbre a cualquier hora del día o de la noche.
     Se paseaba, tumbaba, volvía a levantar, utilizaba los accesorios de gimnasia, era alucinante, parecía no llevar nada puesto en su cuerpo, solo en algún que otro movimiento, pero nada molesto.
    Observó con admiración, como la pantalla y varias cámaras que se encontraban distribuidas por las paredes del habitáculo, se movían a la vez que él; le dio por moverse a saltos, en intervalos cortados y reírse del movimiento de los aparatos.  Pasó todo el día haciéndose a su entorno, viendo y probando para que era y que hacía cada cosa que había, viendo en que numero de canal se encontraban las cadenas que más le gustaban y escudriñando en la consola, que tenía más de cien juegos de todo tipo preparados para usar, la mayoría con posibilidad online.   Luego antes de dormirse, tumbado tranquilamente, se dedicó a ver lo que había de nuevo en las redes sociales, le fastidiaba no poder contar nada de su experiencia, pero ese era el trato top secret.
              Estaba cansado, la primera noche, se acostó antes de la hoar de la cena y durmió como un lirón, se sentía a gusto en aquel sitio, su perfecta y rápida adaptación, era inimaginable incluso para los investigadores del proyecto.   A media mañana, entró enfermero con cara de preocupación.
         .- perdona que no te hayamos traído nada para desayunar, pero ha surgido un imprevisto, cambio de planes.
             Lo mandó desnudar y despojó de todos los sensores.
           .-tranquilo, vístete que nos vamos a hacerte un escáner,
  .- ¿pasa algo?
         .-no es nada importante, se ha detectado una irregularidad durante la noche y debemos verificar su relevancia.
           Tras realizarle las pruebas pertinentes y tenerlo sentado en una sala un par de horas, otro enfermero, lo acompañó a la sala de dirección.   Se sentó frente a todos ellos de nuevo.
   .- bueno ¿qué pasa?
             Uno de ellos, el que estaba situado en el centro, puso sus codos sobre la mesa, apoyó su mentón el los dedos pulgares:
     .-Tenemos una mala noticia;       el escáner, ha revelado, que en la parte izquierda de su cerebro se encuentra alojado un pequeño tumor, esto puede ser debido a algún pequeño hematoma producido por un golpe en su infancia y que con el tiempo se ha llegado a enquistar, lo que puede ser la causa de sus trastornos, debido a la presión que ejerce sobre un área concreta.
  .- ¿Mala? es la mejor noticia que podía recibir.
      .- habrá que operarlo para extraérselo y casi seguro con esta intervención, mejorará su estado;  en fin, es una pena, y perdone; me caía usted bien, tendremos que buscar otro candidato
  .- ¿como que otro candidato?
       .-Usted, podrá hacer una vida normal, no hay motivo para que se someta a la investigación programada, que lo apartaría durante varios meses del mundo y de los suyos.
           En ese momento, el doctor abrió una carpeta y cogió unos papeles.
        .- A partir de ahora todo lo firmado ya no le compromete a nada.
          Cuando se disponía a romperlos en pedazos
.- Espere, si a ustedes no les importa, a mi me gustaría seguir adelante, solo les pido, que mi operación la pongan en su agenda como una prioridad, me harían un gran favor.
         Se  volvió a sentar y a poner los codos sobre la mesa, esta vez sin soltar los documentos
     .-Señores: ¿se puede retrasar unos días el comienzo de las investigaciones?
       Todos sin dudar asintieron con la cabeza
.- ¿y entonces?
         Rompió los papeles en cuatro cachos ante la mirada atónita de sus colegas
    .-Querido amigo, le comunico que: Sin compromisos por su parte y respetando la asignación que teníamos pactada, por unanimidad sigue usted perteneciendo al equipo del programa;  mientras programamos su operación, seguiremos con el proceso de adaptación dentro del calendario establecido, ¿le parece bien?
  .-por su puesto y gracias por tener el gesto de romper los documentos confiando únicamente en mi palabra.
    Sin pretenderlo, habían encontrado el lugar idóneo para empezar sus exploraciones.