sábado, 31 de mayo de 2014

Especialmente vocacionales


      Me sentaré frente a ti para contarte un cuento, y con el lenguaje de los signos, podrás oír mis manos.

     Cuando desees escapar, no correré tras de ti, si no a tu lado, intentando coger tu mano para seguir haciéndolo juntos.

     Me dejaré abrazar en cada una de tus crisis, para que la fuerza se desahogue estando yo entre tus brazos, sin temor a que se vuelva en contra tuya y te lesiones

     Empujaré tu bonita silla, para pasear aprovechando los tan esperados rayos de sol de la primavera, con una mantita fina sobre tus piernas, no me vayas a coger frio.

     Sobre un colchón, te moveré con cuidado, cantándote canciones alegres mientras te cambio de pañal, para que siempre estés sequita y limpia.

     Jugaremos emocionadamente al avión con la pequeña cuchara, para que mantengas la boca abierta y así que aterrice el alimento con suavidad en tu lengua.

     Aguantaré pacientemente a que identifiques mi voz y reconozcas mi rostro con tus manos, aunque una vez analizadas mis facciones  me llames feo y te rías de la forma de mi nariz.

      Permitiré que pintes en el suelo o pared, aquello que nunca podrías dibujar en un folio por falta de espacio.

     Intentare aprender a escuchar la expresión de tus ojos, para saber lo que quieres y aplaudiré mis aciertos como símbolo de alegría por habérmelo indicado bien.

    Te acostaré vestido con un pijama precioso lleno de animalitos de colores, para que no te encuentres solo en tus sueños.

    Besaré tus manos temblorosas, para que tu ausencia de recuerdos, no incida en tu capacidad de sentimientos.

   Solidificare con espesante los líquidos, para que puedas tragarlos con agrado y tu cuerpo esté bien hidratado sin que te avergüences cuando se derrama por la comisura de los labios.

     Cada mañana al verte, repetiré incansable tu nombre, esperando que gires la cabeza y me regales una sonrisa al oírlo con mi tono de voz.

    Cuando acabe mi jornada, me quitaré el uniforme para irme a casa a descansar; tú, te quedarás sabiendo que a tu lado, siempre tendrás un amigo; ese estimado compañero que me releva en el puesto cuando yo salgo.

      Vosotros, sois especiales; nos dais fuerzas cada día para dignificar nuestra profesión.   Aunque haya personas que os miren como raros, con pena, en vez de ternura o naturalidad;  aunque para muchos, vuestros problemas pasen inadvertidos; aunque haya quien incluso reniegue de vosotros.   Mientras nos quede un susurro de aliento, jamás os sentires solos ni os faltará atención y cariño.


      (Poniendo voz a todos esos trabajadores y voluntarios de diversos centros).  
            Dedicado para todos aquellos pequeños, jóvenes o mayores, que por diferentes cuestiones dependen de su cuidado.

jueves, 29 de mayo de 2014

Amalgama escondida

Hola  Ferdinando;
                             Ya ves, hoy es el día de tu cumpleaños y yo quería escribirte algo. Voy a intentarlo.
       Por nuestra diferencia de edad y a consecuencia de que antes de tener en mi mente un poco de sentido común te fuiste a estudiar a la universidad de Córdoba.
    Digamos que bastantes recuerdos de tu adolescencia están como esos cuadros que siempre hacen que estés presente en el pasillo de casa.   Con plumilla en blanco y negro.
       Del dibujo hecho por ti, el que siempre miraba con devoción y que ya hablamos un día,  nunca se volvió a saber su paradero; la cartulina durmió enrollada encima del armario de la habitación,   y la última vez que la recuerdo, dentro de un estuche rígido y con tapa  de plástico verde oscuro, “creo” que era un embalaje de granadas de mano, que alguno de vosotros trajisteis cuando estuvisteis en la mili.    Círculos de color rojo y negro, el que parece, solo yo recuerdo.
      (Que pena no saber dibujar, ahora mismo cierro los ojos y aún puedo “verlo” después de tantos años)
     Ya ves tú, sin embargo debe de haber otro, del que no recuerdo nada, está oculto castigado cara a la parez en la parte trasera de una de las láminas que hay en el pasillo
     Era tal mi admiración por todo lo que hacías, que quizás, eso hizo mantenerme más distante de ti y de lo que pensabas  (grave error).
        Por suerte todos los recuerdos que guardo de los momentos que por vacaciones, pasábamos juntos en casa; allí, sentados a comer en la mesa de la cocina, son los más alegres y de más risas.
    Tu seriedad contrastaba con tu peculiar y sarcástico sentido del humor. Yo, nunca conocí tu término medio.
    Te reías de todo y todos, sabiendo ser burlesco pero sin ofender a nadie. Siempre encontrabas algo a alguien  o alguna situación como diana de tus chascarrillos.
  Tenías una habilidad pasmosa para contar cualquier cosa mil y una veces contada y darle un punto de guasa gestual que la hacía diferente, pero lo más importante era que nos hacías reír a todos, incluso al afectado por tus ocurrencias.
   (Algo cabroncete, sí que eras, para que negarlo)
      Un tiempo (demasiado largo) sin nada, y empezaron a aparecer frente mi vista todo tipo de exuberantes colores celestes, anaranjados, ocres, violetas. Colores suaves, intensos, pálidos, fosforescentes.    
      Tal amalgama de tonalidades que nunca jamás me había preocupado de abrir los ojos para ver.
    El observar ese sorprendente espectro de tu persona, hizo que tal vez me diera cuenta, que no nos habíamos conocido como deberíamos haberlo hecho, SÍ, por ese motivo empecé a escribir y por eso, hice el blog, de ahí lo de su título: 
   “ironías de la vida”.
    Empecé a analizar lo que decían tus escritos. En tus trabajos caligráficos, intentaría saber el porqué de la utilización de cada color en cada momento.  Era una simple obsesión por averiguar algo más de ti;  hasta que me di cuenta que siempre como cualquier artista, haces (aunque respetando algunas normas, o no) lo que se te pone en la punta de la chorra.
       Por fin se desvaneció, aquella imagen rígida y seria  de aquel hermano al que quizás por cobarde, no me atreví a conocer. Tan especial y grande lo veía, que no me di cuenta que yo también crecía. 

 








              El negro sobre balnco y el blanco sobre negro, quedarán como unas  simples láminas anecdóticas de tus principios artísticos, colgadas en el pasillo de casa.

 

             Feliz cumpleaños Ferdinando.

domingo, 25 de mayo de 2014

Información (10) final


        Don Anselmo había comprendido exactamente las consecuencias que podrían acarrear un paso en falso.
              No tenía ni idea de quién podía ser aquel tipo francés que entregó aquel sobre, pero eso quería decir que la información estaba compartida con más gente y la visita de Gloría le preocupaba más que el ir a la cárcel.   Su tono de voz, no podía olvidarlo ni dormido, en sueños le hacían despertar sudando.
     Había demasiada gente importante implicada fuera de su control.   Él, sería la cabeza de turco, solo podía contar con la dilatación en el tiempo, el archivo de la causa por ausencia de pruebas o la falta de interés por parte de todos a que saliese la mierda que había bajo las alfombras de muchos despachos.
 
      Un lunes sonaba el teléfono insistentemente a las siete de la mañana.   Gloría se levantó y recibió la fatal noticia: Matías estaba ingresado en estado crítico tras salirse de la carretera a consecuencia según testigos de ser envestido por otro vehículo que se dio a la fuga inmediatamente.
      Cuando llegó al hospital, se encontró a su marido en coma. El pronóstico era de posible irreversibilidad debido a las lesiones producidas por un traumatismo en la cabeza.  Tan solo un milagro, podía devolverle la consciencia y caso de ser así, las secuelas posteriores podían ser  fatales.
        Gloria asumía lo que tenía que hacer, cumplir su promesa.  Lidia, con Berta quedaría bien atendida y orgullosa de su madre.
       Ya oscurecido, abandonó el hospital, después de pasarse el día entero mirando en silencio el cuerpo quieto de Matías tras el gran cristal que los separaba.
      En la salida, se topó de frente con un coche que la esperaba. Ante su mirada atónita, de la parte trasera bajó don Anselmo.
        .-señora, lo siento, pero le juro por mis hijos, que no he tenido nada que ver y que haré todo lo que esté en mi mano para que se esclarezca este desagradable incidente
    .-perdona, pero no tengo ganas de hablar y menos con tigo
         .-aparte de nuestras diferencias, por favor. Si algo pudiera hacer por ustedes en estos momentos, aquí tiene mi número de teléfono.
   .-a buenas horas mangas verdes
        No es que le hiciera mucha gracia encontrarse con ese individuo, pero por lo menos le quitó de la mente las prisas por cumplir lo que tenía previsto a primera hora del día siguiente.
    Día tras día, con la mirada borrosa esperaba a ver el mínimo movimiento de sus pestañas, o de una falange de los dedos de sus manos, pero ese momento nunca llegaba.
        Jorge, pidió unos días de permiso y volvió a casa, no podía fallarles en tan duro trance, intentando que Gloria, pasase algún tiempo en casa, aunque no llegó a lograr que se separase de aquella ventana.
       Cuando el reloj marcaba las nueve, se iba y cenaba en casa, para acostarse con su pequeña, despertarla a primera hora, vestirla, llevarla con Berta al cole y otra vez a esperar un imposible, con el que poder conciliar el sueño.
        A Lidia por el momento, le habían dicho que  papá estaba de viaje, un largo viaje de negocios. No sabía por qué, pero su pequeño perro Bol, se empeñaba en convencerla todos los días con gemidos, que tal vez no regresaría.
      Su estado físico y mental, se apreciaba cada vez más decrépito, pero nadie podía hacerle cambiar su rutina diaria.
     Se encontró un coche a pocos kilómetros del lugar del siniestro. Allí estaba despeñado en el fondo de un abrupto barranco. Coincidía con el color y modelo que algunos testigos presenciales habían descrito y a unos metros de él, se encontraba un cadáver.  El cuerpo del conductor, según el informe habría salido despedido debido a la cantidad de vueltas que había dado el vehículo y la posibilidad de que no llevase anclado el cinturón de seguridad; para qué complicarse más la vida.   Caso cerrado.
      Todo se hubiese quedado en agua de borrajas, a no ser porque la coincidencia quiso que el fiscal volviese a llamar a declarar a Matías para cotejar lugares, fechas y horas, con las de otros testigos, lo cual lo haría pieza principal de la acusación en el proceso.
     Esto hizo que el accidente saltase a los medios de comunicación.     Su relevancia en la instrucción del sumario, propició que alguien por el precio acordado, filtrase a la prensa el informe pericial y análisis forense del conductor hallado en el terraplén.
    Había detalles muy trascendentes que habían sido obviados extrañamente en la valoración policial.
   Según el perito, no se habían encontrado ningún tipo de  marcas como: frenadas, derrapes, giros bruscos de las ruedas de tracción. Lo que podía avalar la hipótesis que posiblemente el vehículo hubiese sido empujado al vacío desde el exterior.
      El cadáver, mostraba signos de violencia y marcas de haber intentado defenderse en alguna pelea. Pero lo extrañamente ocultado (sin saber porqué) era que las fracturas producidas en el accidente, todas eran postmortem, confirmaba claramente que el conductor ya estaba muerto antes de ser empujado dentro de su coche al abismo, lo que hizo que se reabriese el caso junto a otro paralelo por asesinato y un gran revuelo interno dentro del anatómico forense por parte de la fiscalía.
 
     Llegó el momento de la verdad, ese, en el que una doctora se te aproxima para pedirte que esa vida no se pierda en vano, que sus órganos pueden darles un futuro a otras personas que también tienen familia que está esperando un susurro de aliento y que en tu mano, tienes su esperanza con una simple decisión.
     Ya habían pasado tres meses, el monitor, con una persistente línea estrecha y recta, mostraba que no existía ningún tipo de onda cerebral.  Muy a su pesar, decidió acceder a que desconectasen las maquinas de su cuerpo, que antes, aprovechasen todos los órganos en buen estado y que pudiese descansar en paz.
     No; ni velatorios, ni misas, ni entierros, ni historias teatrales. Tras unos días, un trabajador de la funeraria, llevó a su casa una pequeña vasija de cerámica negra con asitas y tapa puntiaguda. El nombre y la fecha de color dorado y dentro sus cenizas.
        Pasó toda la noche sin poder pegar ojo a pesar del agotamiento acumulado en esos meses.      Antes de rayar el alba, puso sus pies en el frio suelo, se dirigió a la cocina y vertió todo el contenido de la oscura vasija sobre la encimera.
          Junto a las grises cenizas depositó la pistola, las copias en disco y un lápiz USB que contenía la caja de encima del armario.  Luego cubrió todo con el pañuelo de seda como señal de duelo para pensar que hacer.
     Marcó el número de teléfono de la tarjeta. Sonaba insistentemente sin que nadie descolgase una y otra vez, hasta que por fin:
      .- ¿quien llama a estas horas?
.-oye, tranquilito
      .- ¿quién coño eres?
.-soy Gloria, estoy frente a las cenizas de Matías, muy pronto las esparciremos junto a otras en algún lugar
     .-te dije que yo no tenía nada que ver
.-por eso vas a vivir para verlo y sufrirlo en tus carnes
     .- ¿eso es una amenaza a mi familia?
.- ¿amenaza? no. Que iluso eres, eso es una promesa
        Cortó la comunicación y se puso a recoger todo lo que poco antes había depositado en la encimera de la cocina.
 
      No quiso esperar a que nadie despertase.   Abrió su armario, después de arreglarse con sus mejores galas, se fue hasta la redacción del periódico y en el buzón, introdujo un sobre con una copia de la documentación a la atención del director (información exclusiva) para que así publicasen su contenido.
     Se acerco al juzgado y para no andar esperando a que abriesen, ni dar explicaciones, metió por debajo de la puerta otro sobre con contenido idéntico al anterior. Este para (entregar a fiscalía, URGENTE).
      En una cafetería modesta que se encontraba frente al domicilio de Anselmo, sentada junto a la ventana, tomaba serena, un café con leche calentito, esperando la salida de algún familiar de este. El primero en salir, sería el agraciado del premio prometido.
         De repente un gran revuelo de policía y un poco después una ambulancia llegaba con la sirena y luces encendidas a la entrada.   Su mente obsesionada y fría no prestaba ninguna importancia a lo que sucedía ni sus consecuencias. Más tarde o más temprano alguno aparecería y nada ni nadie se lo iba a impedir. 
     A los pocos minutos, la ambulancia se marchaba de vacío.     Un vecino entraba a la cafetería y comentaba con el camarero:
    .-  Vaya follón tenemos en el portal.     Cuando salía esta mañana a trabajar, mi hijo se ha encontrado a don Anselmo ahorcado, colgaba de la barandilla de la escalera con una cuerda al cuello, estaba suspendido en el hueco que queda de los peldaños al ascensor.
     Ya le han tomado declaración, pero ahora hay que esperar al juez para el levantamiento del cadáver.

      Gloria, alzó la mirada ante tal información, luego se acerco lentamente a la barra, pagó el café, salió a la puerta y allí se detuvo un segundo mirando hacia el portal:
    .-es lo único digno que has hecho en la vida, doy por saldada nuestra deuda
      Miró al cielo, dio media vuelta y regresó a casa.
       Se ataron los cabos por lógica, sin preocuparse de contrastar esa información con las imágenes grabadas por las cámaras de seguridad del exterior.
     Las noticias no se hicieron esperar: El subdelegado antes de quitarse la vida, habría optado por entregar toda la información digitalizada en el periódico y en el juzgado.

        Gloria, compraría otra furgoneta nueva y se haría cargo del negocio desde ese momento para seguir con la labor que había comenzado Matías

F I N 

viernes, 23 de mayo de 2014

Información (9)

      Cuando el entorno parecía estar de nuevo tranquilo, llegó otra carta sospechosa.
     Abogaduchos de don Anselmo, habían interpuesto una querella contra él, por difamación é injurias; con resultado de daño moral irreversible contra su cliente, por lo que solicitaban una indemnización de veinte mil euros, con la “posibilidad” de rebajar esa cuantía, si se retractaba ante el juez y fiscal de su declaración y le pedía disculpas en los medios de comunicación.
     .- ¿y ahora que vamos a hacer?
        .-nada esperar
            .- ¿pero porqué no le metiste un tiro, cuando tuviste oportunidad?
       .-caya, caya Berta, que este es capaz de volver
   .-no creas que no lo he pensado alguna vez
           .-ahora ya no debes dar marcha atrás, o el fiscal te acusará de perjurio
 .-pero si era una declaración, no un juicio
     .-ya y si te llaman, que te van a llamar para el juicio, ¿qué haces?
   .-vaya follón
         .-llamaré a Jorge para saber que se le ocurre; que consulte con los abogados de la empresa, que le digan si se puede hacer algo
  .-otra vez en la ruina; esto es una mierda
     .-oye, Matías de eso nada, ahora no te puedes venir abajo ¿tú sabes que decía mi abuelo?
  .-pues no
     .- deja, deja que corra, que a carrera larga, la liebre siempre es del galgo
  .-pero parece que no te das cuenta, que aquí la liebre soy yo
    .-o no, yo creo que no eres tú
         .-Matías, no sé qué motivo tendrá tu mujer para pensar eso, pero nunca la había visto tan segura de lo que dice; seguro que lleva razón
     .-Berta, llama a Jorge y dile que intente venir un par de días a hablar con migo de un asunto, en caso de no ser posible, iré yo a verlo a Francia
  .-estás como una cabra
      .-tú, a despachar a la tienda; por una vez, voy hacer algo como me dé la gana
      No se habían percatado de la fecha, el cumpleaños de Berta estaba a punto de caer, faltaban menos de dos semanas, y él venía siempre a pasarlo con ella. No hacía falta ningún viaje extraordinario.
     Por fin apareció Jorge.
        .-gracias a dios que has llegado, tengo que hablar contigo
    .-primero tengo de hablar yo con vosotros mientras comemos
          .-Lidia, corre, ha llegado tito Jorge
.-hola tío, ¿Qué me has traído?
     .-por el interés te quiero Andrés
.- ¿pero que me traes?
     .-una cosita, pero hasta después de comer no la vas a ver, ¿y Bol?
.-en el balcón.  Vamos abrirle la puerta
     .-pero cuanto ha crecido, si ya es tan grande como un conejo
.-ten cuidado que ahora ya tiene dientes y muerde
     .-sigues siendo igual de miedica, ¿no ves que solo quiere jugar?
             .-chicos, a poner la mesa
       .- ¿Qué nos querías decir?
               .-primero se come y luego se habla; manía con fastidiar la comida
      Comieron entre risas, a cuenta de las ocurrencias de Lidia y las bromas de Jorge; una vez terminado el postre:
        .-ahora, a ver. La niña, el perro y la abuela, a jugar un poco a la habitación y a echarse la siesta un rato
          .-eso te lo crees tú, Matías vete y acuestas a Lidia
    .-a tomar por saco, siempre le toca al mismo, esta vieja mandona, es que no cambia
        .-mientras esperamos, ¿porqué no hacéis un café?
              .- ¿y por qué no lo haces tú, mandón?
        .-pues lo hago yo, menudo problema
    .-deja que ya voy yo, que luego me toca recoger la cocina y tú eres un poco trazas
              .-habría que ver como tiene su casa el solo
       .-como los chorros del oro
               .-pues aquí nunca diste palo al agua
           .-porque aquí nunca me dejaste, según tú eso era cosa de mujeres y así he salido yo
               .-eres más tonto
           .-sí, sí, gracias a que en mi calle hay muy buenos restaurantes y la nevera siempre llena de embutidos y precocinados
    .-hablar un poco más bajito, que se acaba de quedar dormida
        .-bueno señoras; he hablado con los abogados.
        No tienen nada clara la situación, por lo que han consultado con un bufete de colegas aquí en España.
    La solución rápida, sería tener algún as en la manga y que tenga que retirar dicha demanda, haciéndole saber, claro está “extraoficialmente” que puede ser difundido su contenido
   .- ¿y si no tenemos nada?
          .-da igual, hay que hacer que crea que sí que lo tenéis. Algún testigo, algún papel, alguna foto
      .-de eso quería yo hablarte, este es un cagón, pero si hay pruebas y documentos
          .-entonces, ¿Qué pasa?
  .-que me han amenazado con hacer daño a mi niña y a mi esposa
         .-pero esto cambia todo, ¿tenéis mucho?
     .-todo, más de lo que te puedas imaginar
         .-pues me vais a dar eso a mí y yo una copia a mis abogados.  Le vamos a hacer llegar copia de un simple papel poco comprometedor a él, advirtiéndole que esta documentación está en manos de más personas y que en caso de que ocurra lo mínimo todo saldrá a la luz con pelos y señales. Ese mismo documento, lo enviaré yo desde Francia anónimamente a distintos periódicos internacionales para que sea publicado y así vera que no es ningún farol
    .- ¿y si no hace caso?
           .-se irá mandando un documento diariamente a los medios hasta que esté retirada la demanda, por lo que si sabe lo que le interesa, lo hará al día siguiente
   .-como digas
        .- ¿y cómo es que tú tienes esos documentos?
   .- yo era el encargado de guardarlos en sitio seguro cuando trabajaba para él como guardaespaldas, me obligó con amenazas a devolvérselos hace un tiempo, pero yo los escaneé noche tras noche y los guardé un pincho.
          .-pues no sabes lo bien que hiciste. Además voy a ser yo quien le entregue la primera prueba de cargo y la advertencia
       Todo parecía tener perspectivas de arreglarse, sí, pero Gloria no estaba satisfecha.  Esa misma tarde, se fue a dar una vuelta, esperó pacientemente cerca de la entrada del portal de don Anselmo y cuando lo vio entrar en el garaje, se metió en el edificio, subió las escaleras y lo esperó en el rellano de su vivienda.
        Salió del ascensor y antes de que llegase a meter la llave en la cerradura, gloria le puso la pistola de su marido en la nuca. Él quedo tieso como un palo.
     Soy la mujer de Matías, mañana alguien irá a habar contigo por las buenas, si alguien de mi familia recibe la más pequeña amenaza o alguien le toca un pelo a mi niña, no iras a la cárcel; yo me encargaré de que vayas directamente al cementerio junto con tu mujer y tus dos hijos; entendido, tu sabes que las mujeres con esto no bromeamos, así que a partir de ahora ya puedes protegernos bien, no sea que algún otro caco intente robarme la cartera y el muerto seas tú; si dices una palabra de esto aunque sea a un cura en secreto de confesión, date por enterrado junto a los tuyos.
     Guardó la pistola en el bolso y marchó.   Anselmo tardó unos minutos en recuperarse y abrir la puerta de su casa.
      Por la noche, hicieron varias copias completas a CD de lo guardado, luego buscaron algo discreto; Jorge, Berta e incluso Gloria, alucinaban con lo allí guardado; eso era una bomba de relojería para muchos políticos, altos cargos, empresarios, policías.    Los documentos no dejaban títere con cabeza.
    Por la mañana, Jorge se dirigió a la subdelegación.
(Con un marcado acento francés)
      .-buenos días; necesito hablar con don Anselmo, el subdelegado
          .-lo siento pero no se encuentra aquí
    .- ¿y sabe a qué hora tiene previsto llegar?
          .-no creo yo que venga esta mañana, hoy llamó a primera hora para comunicar que anulásemos todas las citas previstas, que se encontraba indispuesto y se iba a quedar en casa
    .-necesito entregarle esta carta urgentemente
         .-pero como comprenderá, ¿qué puedo hacer yo? déjela aquí y mañana se la entregaré
    .- ¿se la podría llevar a su casa? ya que es un asunto que puede repercutir a nivel internacional
         .- es que yo, no puedo proporcionarle la dirección de su domicilio particular
    .-perdón, yo me refería a que se la llevase alguno de ustedes
          .- ¿pero?
    .-es de extrema importancia porque puede afectar seriamente al proceso judicial en que está implicado
         .- lo intentaré, ¿pero quién le digo que la envía?
    .-dígale que es de una persona, asignada al caso en la embajada francesa, él entenderá en seguida quien es el remitente
          Después se acercó hasta un locutorio público, desde el que poder enviar ese mismo documento a los abogados de su empresa en París, para que desde allí lo hicieran llegar a todos los medios de comunicación, tanto nacionales como extranjeros.   Antes de medio día, estaba expuesto en todas las ediciones digitales de los medios escritos.
     Era un simple justificante, que aparentemente no tenía que ver nada con él, pero de vital importancia para otra causa judicial abierta con la que aún nadie lo había relacionado hasta ese  momento.
     La mañana siguiente, como por arte de magia, las demandas estaban retiradas, sin que ni siquiera los abogaduchos de don Anselmo, supieran el motivo real de tan precipitada decisión.
              Por fin llegó el día esperado y celebraron el cumpleaños de Berta alegres y felices.

miércoles, 21 de mayo de 2014

Información (8)

            Cuando se acostaron se acabaron las risas.
     .-bueno, llegó la hora de dar explicaciones
  .-no sé, como empezar
     .-puedes empezar por lo que has hecho este medio día
   .-he ido a entregar la dichosa cartera a su dueño
      .- ¿que había en ella?
   .-nada importante, papeles
      .- ¿y quién es el dueño?
   .-alguien al que no conoces
      .-no seas mentiroso ¿qué me quieres ocultar?
   .-mejor que sepas lo justo, lo hago para protegeros
      .-la única manera de protegernos es que sepamos toda la verdad
   .-si no sabes nada, nadie te amenazará como tiempo atrás estuvieron haciendo con migo
       .-claro y se van a creer que la tonta no sabe nada, me podrán amenazar igual que a ti y no tendré nada con que defenderme
   .-está bien, si algún día a mí, me llegase a pasar algo; vas a tener razón. Mejor será empezar por el principio, pero piensa que hoy no dormimos
       .-tengo todo el tiempo del mundo, pero eso sí, ni una mentira más
   .-te lo prometo
       Se remontó a los tiempos en que eran novios y lo destinaron al país vasco como escolta de un concejal de un pequeño pueblo de la montaña.   Ese concejal era don Anselmo.
     La historia avanzaba, mientras, los minutos fueron pasando, hasta que llegó al día en que él, lo  amenazo en su despacho con la pistola, después de negarle el trabajo.
       .- ¿y por qué le has dado la cartera?
   .- si no lo hacía, mandaría a alguien a recogerla y tan solo dijo que le podía pasar algo a Lidia
       .-ahora ya no tienes nada con que pararle los pies
   .-me dio su palabra de que nos dejaría en paz
       .-ja, ese nunca tuvo palabra, solo ha sido un trepa  capaz de cualquier argucia para subir un peldaño en el escalafón político, vendería a su madre por un puesto en Madrid, aunque fuera de botones
   .-pues te contaré un secreto que nadie sabe
       .- ¿estás seguro?
   .-esto solo lo sabremos tu y yo.       En aquellos días en que........
      .-cuidado no sigas, solo hemos de saberlo nosotros.
           Como cada mañana debía levantarse. Era justo la hora en que dejaron de hablar.   Tenía que estar en las naves del mercado temprano, para escoger las cajas de fruta con mejor presencia a un precio adecuado para poder seguir dando un buen servicio a sus viejas clientas, tan cotillas como fieles.
      Ya se acercaba el día del cumpleaños de Lidia, cada uno, según habían quedado de acuerdo le compraría un regalo, pero ninguno sabría el de los demás  hasta la hora de la tarta, entonces se desvelaría la incógnita.
     Pasados los días y después de intentar averiguar sin conseguirlo cual era el regalo los otros; por fin llegó el momento.
     Habían quedado con Jorge que ese día lo llamarían por videoconferencia a la hora del acontecimiento. A lidia ya se le hacían interminables aquellos minutos.
     .-llama a tito y cuando conecte empezamos a abrir los regalos
          .-felicidades Lidia, mi regalo lo dejaremos para el ultimo, dile a esos que empiecen, yo veo muy claro  y nítido todo el comedor
      Berta fue la primera en darle su regalo.
.- ¡alá!   Que muñeca más bonita y tiene vestidos para poder cambiarla. Gracias abuela
      .-ven hija, a ver si te gusta el mío
      Gloria saco unos pendientes de una cajita y se los puso, luego le acercó un espejo para que pudiese ver cómo le quedaban
.- qué bonitos mamá, te quiero mucho
         .-parece que ya me toca a mí.    Por fin he vuelto a la tienda de regalos ¿te imaginas lo que te he podido comprar?
     .-vamos no seas pesado
          .-este es capaz de regalarle otro huevo
              .-pues no lista
     Sí, que se había pasado por aquella  tienda para ver a la dependienta, darle explicaciones y pedirle perdón por lo ocurrido hacía ya justo un año, pero en realidad compró su regalo en un comercio de al lado.
               .-abre esta caja
.-hay que pequeñito, que cosita mas cuca
       Era una bolita de pelo, bajo la que se escondía un perrito de pocos días.    Solo lo miraba, no se atrevía a meter las manos en la caja
.-le llamaremos Bol
          .- ¿bol?
.-sí, porque es como una bola
             .-a ver Jorge, te toca
     .- mi regalo está tras la puesta de entrada, ábrela y mira en el rellano de la escalera
      Lidia se olvidó del perrito y salió corriendo; al abrir la puerta, justo allí, estaba sentado Jorge esperando;  había puesto en la pared una gran foto de la pared de su habitación para que todos creyesen que estaba en su casa, allí, en un trípode que se fue al suelo con las carreras de Lidia al ir a abrazarlo estaba atado el móvil que utilizó como Cam.
.-papá, mamá, abuela, que está aquí
      Jorge entró con ella en brazos; La enana se le había agarrado como una lapa; no había quien la soltase.
        Una vez se soltó, Berta, gloria y Matías pudieron saludar y dar la bienvenida  al invitado sorpresa.
    .-vaya, esto no nos lo esperábamos
.-mira, una muñeca y un perrito, ah, y mi mamá me ha regalado unos pendientes; mira, mira,
          .-pero saca a Bol de la caja
.-no que muerde
      .-pero si no tiene dientes
         Tras un par de intentos y acariciar con cuidado su pelo suave, se decidió a cogerlo entre sus manitas.
      .-ves, no te hace nada
.- que pequeñito que es
     .-mira te quiere chupar
.- ¿y si muerde?
     .-déjate, ya verás cómo no te hace nada
     Así observando su rostro iluminado por la emoción, estuvieron unos minutos; luego, sin previo aviso, dejó el perrito en la caja.
.-oye tito, ¿y tu regalo?
           .-mi regalo soy yo, he venido a felicitare
.-no, eso no vale; digo el regalo
            .-pues yo, ¿te parece poco regalo?
.-abuela, jo, dile que me lo dé
      .-venga, deja de fastidiar y dale su regalo
        Metió la mano en el bolsillo y sacó algo escondido en su puño cerrado, al rato, después de que intentase ella abrirle los dedos para verlo, se lo enseñó.
         .-te he traído un regalo muy especial, este anillo. ¿Lo reconoces mamá?          Esto me lo regaló mi querido padre, cuando yo cumplí justo los tres años, igual que tú ahora; lo llevé puesto hasta que me quedó pequeño y lo guardé en sitio seguro como recuerdo, hasta hoy que pasa a ser tuyo; dentro llevaba inscrito mi nombre y ahora también el tuyo.   Trae la mano.
     Lidia se quedó mirando la expresión de tristeza de Berta sin pestañear, mientras Jorge, ponía el anillo en su dedo corazón.     Para el anular aún era demasiado grande.
    .-a ver, las copas para brindar, yo saco el moscatel
        .-ahora todos a cantar: cumpleaños feliz….
      Y de esa manera el jolgorio volvió a invadirlos en el comedor.
     En la cocina, Gloria recriminaba a Jorge por haberle regalado ese recuerdo a la niña.
 .- ¿como se te ocurre darle un recuerdo de tu padre?
    .- ¿y qué mejor que se lo ponga ella?
.-pues a tu madre, ¿no sé yo si le habrá hecho mucha gracia?
    .-está más contenta que unas pascuas con que se lo haya regalado, pero le he recordado otros tiempos en que eran distintas las cosas
.-tú también; ya le podías haber dicho algo, para que estuviese avisada
     La tarde entre risas y juegos se pasó en un plis-plás; antes de la hora de cenar, ya tenía puesto el perro, un vestido de la muñeca, que andaba semidesnuda en la caja de Bol.
    Después, esa noche, había que acostarse temprano, al día siguiente, irían todos a despedir a Jorge hasta la estación; el tren salía muy temprano para poder llegar a tiempo de coger el avión.  Luego, Matías las volvería a subir a casa y después directo a por la fruta.
     .-venga perdigón, ponte el pijama y a nuestra cama
           .-de eso nada, esta noche, Bol, la muñeca, Lidia y abuela dormimos juntas en mi habitación
      .-¿pero qué leche vais a meter al perro en la cama? cuidado a ver si lo espachurráis
          .-ya tengo yo cuidado
   .-tú te quedas como un ceporro en seguida, como no tenga cuidado la muñeca esa, mañana amanece con el pelo planchado, en vez de una bola, va a parecer una rata
          .-no hagas caso, que no tienen ni idea
      Una vez acostadas, pusieron a Bol y a la muñeca en la almohada; luego Lidia se arrimó un poquito al oído de Berta para susurrarle:
.-pero no ronques, que se asustan
            .-yo no ronco
.-no sé, papá dice que no es que soples, es que rufas
       (En voz alta)
            .-Matías, ya hablaremos tu y yo
      .- ¿qué dices ahora?
            .-nada, nada que arrieritos somos
      .-duérmete y deja de dar voces a estas horas
              .-mira que siempre igual, parecéis el perro y el gato
            (Gloria bajó la voz)
     .- ¿has puesto el despertador?
             .- si a las cinco y media
    .-a dormir; buenas noches cariño
             .-que descanses
     Por la mañana después de vestirse, liaron a Lidia en un edredón sin quitarle ni el pijama; pobrecita, iba tan dormidita en los brazos de tito Jorge, al que ahora no le habría importado perder aquel tren por tenerla así mucho más rato.     De regreso a casa, subió igual de dormida y sin despertarla;  volvieron a meterla en la cama; enrollada tal y como iba.
    A las pocas semanas, pudieron entender el porqué de  las prisas por recuperar los documentos y la negra cartera.  En los medios informativos de la provincia, la noticia ocupaba las primeras páginas.  Se anunciaba la imputación judicial, del subdelegado del gobierno en un caso de corrupción de ámbito nacional.
     .- ¿qué te parece Berta, ya cayó el pájaro?
        .- ¿pájaro? mejor di, que a todo cerdo le llega su San Martín
.-da igual estos dentro de tres días están en la calle
        .- ¿de tres días?, espérate a ver si entran
.-pues lo más seguro, ni eso
     .-anda y que se pudra, se lo tiene bien merecido
        Pasados unos pocos días de aquella noticia, a casa llegó una citación del juzgado.    La fiscalía solicitaba su declaración como testigo. 
   La discusión estaba servida durante el postre ese día a la hora de comer.
        .- ¿y qué piensas hacer?
     .-pues no lo sé
           .-tú, vete y di la verdad de todo lo que sepas
     .-se demasiado
        .-yo te apoyo, di la verdad y punto
            .-si lo que sabes lo hunde, que se joda
     .-no os quiero meter en esto
        .-ya estamos dentro
     .- ¿sin pruebas?
         .-tú, solo tienes que contestar a las preguntas con sinceridad, no sea que estos, luego te vayan a acusar de perjurio o alguna historia de esas
    .-es que con este tío, no voy a dormir a gusto hasta que se muera
        .-pues que tampoco pueda dormir él
      Acudió al juzgado y contestó a todas las preguntas sin tapujos; intentando no extenderse demasiado en las respuestas.
   No se sabe ni cómo, pero su declaración se filtró a la prensa, antes de que él pudiera llegar a casa.
    Aparte del de su familia, tenía el apoyo de todas las clientas. Animaban y alababan su valentía: si hubiese más gente dispuesta, esos estarían todos en la cárcel y si les hiciesen devolver el dinero, no habría hecho falta recortar y hacérselo pasar mal a tantas familias que no tienen ni para comer.
    Aquellas palabras le hicieron recordar momentos no muy lejanos y aunque nunca olvidados ya no estaban tan presentes; él había tenido mucha suerte, tenía que seguir adelante por el resto de la gente, los que aún seguían en aquella cruel situación.