jueves, 28 de junio de 2018

La trampa




            Los minutos y horas, viajaban encaramados a un carro tirado por un borriquillo al que no le sobraban las fuerzas.     La cuesta cada vez más empinada provocaba una inusual lentitud.

    Los meses y años en cambio, parecían ir montados en un corcel desbocado, tan veloz como el viento, que sigue deslizando sus cascos,  golpeando sus ansias de alcanzar el horizonte.

         El pasado atenaza cada instante con sus recuerdos.
     El presente se pierde, buscando solución a los errores cometidos y que no tienen solución.
         El futuro se etiqueta de antemano, con un presente perdido, con un tiempo no vivido, que solo hará que los pretéritos, sigan ocupando los lentos minutos que hacen los días más largos y los años más cortos.

              Y al final del camino. Que poco han dado de sí los senderos recorridos. Por pensar en las huellas que quedaron atrás, se olvidó el pisar con fuerza para que sus pies hicieran nuevas oquedades en la arena, las que poder mirar y recordar con el alivio del trayecto andado.

     Que lentos y ridículos sus últimos miles de días y que vacios los exiguos lustros de su existencia.

      La trampa de la melancolía que añora lo que pudo ser y no fue.        El pozo del no hacer nada, esperando a que llegue la noche, por no intentar abrir los ojos para ver la luna.           Y al fin, cuando el sol deslumbra arrasando las pupilas dormidas, uno mira sus manos y las ve, arrugadas y vacías, con anquilosados dedos.        Sin fuerzas para acariciar la flor, que ha estado creciendo sin él darse cuenta.
     Ya el aliento jadeante, no permite a sus labios esculpir un último beso y  la garganta seca, se olvidó pronunciar palabras.  Entonces sus viejos ojos, derraman la última lágrima y un pañuelo de dulzura acaricia su mejilla.
  La última huella en su mente.   La última y la primera.    La primera y la única. La única, la póstuma de esta vida que es mejor olvidar para empezar el camino sin volver la vista atrás. Que atrás queden los trampeados negros recuerdos, olvidados permanezcan los errores que no se pueden arreglar.

         Como reverdece un árbol, llegando la primavera, el corazón se ilumina y brota una flor hermosa.  Sus colores engalanan las mejillas bajo el sol y su aroma se dispersa creando miles de estrellas que cubren el firmamento acompañando a la luna que dibuja una sonrisa en esa noche  cerrada.
       Se quitaron los cerrojos.   Se rompieron las cadenas.  Se liberaron los brazos para abrazar el futuro y los pies pisan con fuerza la dureza del camino. Camino lleno de huellas, huellas grandes y pequeñas, porque ahora ya no anda solo.

           Lentamente sobre el carro tirado por el borriquillo, van los años acomodados, mientras los minutos cabalgan en el caballo del viento, sin coger atajos, brincando por montañas y valles, pero sin prisa por llegar al horizonte.






miércoles, 27 de junio de 2018

¿bailamos?




   Sueños, quimeras, ilusiones.
        Vestido largo de raso
y zapatos de tacón.
   Una diadema en el pelo
engalanada con flores.
    Yo con traje y pajarita
como manda la ocasión.


     Un salón lleno de luz
donde suena un bello vals.
    Te espero junto a la orquesta
para coger tu cintura
y con los giros del baile
elevarte al quinto cielo
donde los ángeles blancos,
blancos como nuestro amor,
recitan las poesías…
     Las que hace el padre a su hija,
que el hijo canta a su madre,
esas, bordadas en seda
en el traje de un bebé,
esos escritos de amor
que solo las almas blancas
son capaces de entender.

   Yo con traje y pajarita.
       Tú con vestido de raso.
           Entre tú y yo la distancia.
    La distancia que no existe
porque gratis son los sueños
y en los sueños nadie manda.

    Fantasía es realidad.
        Pues nuestras almas las une
la grandeza de los mares,
los mares de la amistad.






sábado, 23 de junio de 2018

Tarjeta 42


A Comisión


       Mientras esperaba a ser atendido, hacía recuento de las posibilidades que le brindaban esos euros que estaba a punto de cobrar.
  En el pasillo al que daba la puerta trastera del despacho él solo en la penumbra apoyando su espalda en la pared. Ni una silla en la que descansar la espera, ni un murmullo con que distraer el aburrimiento.
-Por fin se abre la puerta y alguien pronuncia su nombre-
   Frente a la mesa, de pie, espera ver como se cuentan los billetes correspondientes uno a uno.  El cajón se abre y una mano escarba en un fajo de veinte. Con la otra mano se van depositando en el centro al tiempo que en voz alta se lleva la cuenta:
    .- veinte, cuarenta, sesenta, ochenta… Así hasta llegar a quinientos cuarenta.
    
   La disconformidad con la cantidad abonada rompe la austeridad de las miradas.
   .-perdone, pero este mes, le he enviado nueve clientes, por ochenta que yo sepa son setecientos veinte.
      .- tienes razón y no.   Si que enviaste ese número de clientes, pero últimamente has bajado mucho el listón, así que bueno, te los abonaré a sesenta, aunque algunos ni eso valen.
  .-esto me parece un robo
         .- ¿un robo?  Oye, tráeme los historiales marcados con un círculo verde.
*Entra por urgencias con traumatismo intercostal.
      –un vendaje y para casa –
Otro
 * Luxación en dedos de la mano derecha.
     - vamos ni uno roto –
Seguimos. Bueno este no está mal
* Fractura en hombro izquierdo con desgarro de axila, ingresa en planta, pendiente de quirófano.
    - pero vamos es el único que merece relevancia –

       .- Mira. Te empeñas en agredir a gente joven y así el negocio no funciona. Cambia de una vez el chip. El futuro está en las personas mayores, menos esfuerzo y más tiempo de recuperación.
.- ya, ¿y si alguno se queda en el golpe?
        .- tranquilo toma este teléfono y dile que vas de parte mía, es discreto y paga bien.
.- pero esto es la tarjeta de una funeraria
     .- no, si quieres te doy el teléfono de una floristería.




  

viernes, 22 de junio de 2018

Discordancias





El paño blanco y virginal, a grises tornaba.
    El amor se fue gastando, de tanto sacarle brillo.
       El pan se quedaba duro, junto al filo del cuchillo,
que de derrochar acero, ni el aire tibio cortaba.

   Anochecer disipado, por brumas engalanadas.
      Amaneceres perdidos, en sueños interminables.
           Días eternos de gloria, minutos inexorables,
que al mismo sol eclipsaban, con sus siluetas aladas.

    Con las canas los recuerdos, regresan al corazón.
         Las pupilas se dilatan, para ver la claridad,
de las huellas de esos pasos, que plasmaron su razón.

   Tiempo marchito dispuesto, a olvidar la realidad.
      Almas vestidas de luto, que han perdido la pasión,
y ahora teñidas de sombras, la mentira es su verdad.





jueves, 21 de junio de 2018

Infinito




     Un minuto, una hora, dos, tres… qué más da.
  El tiempo solo es tiempo, sin contenido ni continente, sin llanto ni risa, sin nada importante o relevante, nada que merezca la pena si no estoy a tu lado.
    Pero hoy, esta tarde. Cada uno de esos minutos que han trascurrido en esas horas han sido geniales.
   Sentados, hablando, sacando temas de conversación de esas cosas aparentemente banales, pero que tanta importancia siguen teniendo para nosotros. No por su trascendencia ya pasada e irrelevante, pero que siguen aferradas a nuestra complicidad como seres enlazados en sintonía cósmica, eso que siempre nos quedará como símbolo de nuestra existencia.
    Un minuto, una hora, dos tres…  qué más da.
       Tanto tiempo perdido muchas veces, por razones que no se pueden entender, a las que no le pedimos explicación, por esa desidia apática que se esconde tras un, para otro rato, para otro día, para un mañana que se convierte en un nunca.  Ese nunca que esta tarde por fin se convirtió en un hoy, en un ahora, en un deseo cálido, irrefrenable de convertir el instante en infinito, la lluvia en abrazo, la sombra en luz y el tú y yo en nosotros.
          Ya ves, las nubes no lloraron de alegría, pero nos sentimos abrazados y la luz, el brillo que nuestros ojos desprendían, nos hizo olvidar esas sombras que durante la mañana nos habían atenazado, aunque como siempre intentásemos exteriorizar el “no pasa nada”.
    Y esta noche, el beso de hasta mañana, tendrá un aroma tal vez distinto o un color más verdoso, pero siempre, siempre será de un intenso azul, por que al igual que ayer, al igual que mañana, mi amor, siempre será…   ..... INFINITO.






martes, 19 de junio de 2018

Me Pareció




   El día ha terminado, la oscuridad empieza a abrazar los juncos que reverdecen las orillas del rio.
  El sonido del agua parece hacerse más intenso con la falta de bullicio, la gente se ha ido, pero él, permanece allí sobre aquella solitaria piedra sentado.
      Es el momento.   Cogido del brazo de la brisa, pasea ribera abajo por el estrecho sendero hasta llegar a ese puente que lo espera.      Bajo él dejará sus ropas bien dobladas.        Sobre ellas el paquete de cigarrillos y el encendedor.
       Mete los pies en el agua, se santigua y comienza a andar hacia lo más profundo. Sobre él, asomado a la barandilla bajo la luz de la única farola que funciona, alguien     - un señor-  mira hacia abajo sin ni siquiera verle  – demasiado ensimismado en sus pensamientos, como para reparar en detalles-
Ya tan solo la cabeza emerge a la superficie.  Un par de pasos más y todo su cuerpo quedará a merced de las aguas.      De pronto se percata que el señor de arriba a desaparecido    ¿habrá seguido su paseo?  O   ¿lo habrá pensado mejor y tal vez vuelva a intentarlo mañana? que importa.
         Por debajo de un tronco que hay ahí en el fondo, introduce los empeines de sus pies, para así evitar el flotar o que lo desplace la corriente. No quiere que su mente se despiste con cosas que no vienen a cuento.
  El ritmo de su corazón la marca la pauta de su cuenta.
       Poco a poco nota como se va decelerando.
          Con todo y con eso sigue su cuenta y cuando llega a ciento cincuenta, suelta sus pies de debajo del tronco e impulsándose hacia arriba saca la cabeza con fuerza e inspira, llenando sus pulmones de aire.
        Media vuelta y de nuevo a la orilla a secarse con la luz de las estrellas, agradeciendo la frescura lejos del calor sofocante de la tarde. 
        Que extraño la cajetilla de tabaco y el encendedor han desaparecido de donde él lo había dejado ¿Quién habrá sido el hijo de mala madre? Mira a su alrededor.
          Justo allí a unos metros se ve lucir la punta de un pitillo encendido.
.-oye desgraciado, ese tabaco es mío
    .- perdone usted, pero me tomé la gratuita libertad de cogérselo por no molestarle, de hecho, pensé que ya no saldría a buscarlo.
    Se vistió (por no acercarse a él en paños menores)
.- hombre es usted,  ¿qué?     ¿se arrepintió en el último momento?
      .- arrepentirme de qué
.- me pareció
     .- pues eso, a mí también me pareció
.- me gusta venir cada anochecer cuando no hay nadie y aguantar la respiración debajo del agua.     El día que no llegue a contar los ciento cincuenta será que tengo que dejar de fumar.   Mientras tanto no es cuestión si quiera de planteárselo.
    .- pues tenga un cigarro, al fin y al cabo es suyo.






jueves, 14 de junio de 2018

No molestar



Pensada de miércoles.

    Paseando por el camino serpenteante que llega hasta la cima del cerro, se podía sentir en cada inspiración el aroma a tomillo que me trasladaba a los años de infancia hoy tan lejanos, pero siempre presentes en la añoranza del recuerdo.
                En un zopetero donde el sol caía de plano, unas aliagas en flor llamaban mi atención.  Paré de caminar y me agache junto a ellas a observarlas de cerca e intentar escuchar el sonido del canto de sus espinas.
         Un minúsculo crujir de hojas secas, llevó mi mirada hasta el suelo.  Allí un gran lagarto verdoso permanecía expectante con su cuerpo aplanado y la cabeza erguida.
           No sin algo de temor, acerque mi mano pensando que saldría corriendo, pero con la precaución debida, no fuera a ser que sus dientes hicieran presa en mis dedos.  Ni se inmutó. La duda de si acercar más la mano o no me llevó unos segundos.  – Mejor lo dejo en paz-   pero seguí allí en cuclillas observándolo.
  Pasados unos minutos de pronto volvió su cabeza  hacia mí y me miró amenazante.  Entonces sorprendido pude oír su voz:
.- ¿no has visto ya todo lo que tenias que ver? Pues levanta y marcha de una puñetera vez,  que me estás espantando las moscas.

Vamos…    Observa, analiza y aprende, Pero no molestes.





miércoles, 13 de junio de 2018

Y porqué


Evento:
Memoria histórica poética.
 ( para RadioSatéliteVisión)
Autor: Carlos Torrijos
C.a.r.l. (España)

--- Y PORQUÉ…. ----

Yo que nunca fui muy culto
en cuestiones de gramática
empecé a contar historias
de diferente temática.

Hasta entonces me expresaba
con los signos musicales,
los dedos sobre las teclas
me hacían surcar los cielos
y navegar por los mares.

Luego llegaron los versos
y gritar causas perdidas
reivindicar los derechos
y dar un porqué a la vida.

.. …..
Me queda la reflexión:
Las palabras son tu huella.
Que nada…  apague tu voz.






martes, 12 de junio de 2018

Una noche Bolg.

Hola...
Estimado blog;
              De esto no hay no borrador ni nada que corregir. simplemente lo escribo en directo para tí, confidente, amigo y compañero de tatas horas.
   Se que mi memoria es algo inestable y siempre  "como bien sabes" recurro a mis entradas antiguas para recordar situaciones que he vivido y en forma de metáfora he dejado editadas en tus entradas.
   Pues bien,, esta noche, estoy sin sueño, pero me siento feliz y agradecido con tu compañía.  No es pertinente andar desvelando a nadie, pues nada malo me pasa, simplemente decidí no tomar hoy las pastillas, esas que me hacen no tener pesadillas que me atormentan el descanso. En realidad sueño lo mismo, pero gracias a ellas no me afectan los sueños de la misma manera.
   Ya ves, yo que me duermo en el filo de un cuchillo, no soy capaz de conciliar el sueño, por lo que he decidido bajar al ordenador y escribir.
   Esto no lo compartiré, aunque tampoco lo dejaré oculto. nada hay que ocultar. A este blog entra poca gente a leerte, ya que cuando comparto lo hago con accesos directos a una entrada determinada, por lo que del resto casi nadie sabe.
    pues bien, en un primer momento pensé en tomarme la dichosa pastillita, pero sabes que soy muy radical y tozudo, así que no pienso hacerlo. estaré un rato contigo y luego volveré a subir a la cama. 
    Se que mañana arrastraré los zapatos, pero lo mismo después de comer me puedo dar una cabezada aprovechando algún rato en que no entra casi nadie al bar,, "osea como siempre, por no perder la costumbre". o lo mismo hay suerte y mañana viene gente a tomar café y así hago caja.
    el reloj marca las 03.07.. buena hora para ir a pescar, pero como aquí no hay río, me conformo con tomar un café y echarme un pitillo en tu compañía.
     Fíjate que este año para octubre hará ya 18 años que estamos juntos, aunque tardé algún tiempo en comenzar a publicar entradas con más constancia.  Quien nos lo iba a decir. 873 publicaciones más algunas ocultas en el borrador " cosas que talvez nunca terminaré o ni tan siquiera debería haber empezado".
     Tú has sido siempre el primero en leer mis relatos, pensadas, poemas y como no, lo más grande, esas cosas dedicadas a mi familia y aunque se que a veces te he aburrido, siempre has estado ahí, aguantándome en mi soledad, en cualquiera de esos momentos en que como hoy me da por pensar en voz alta sin pronunciar palabra.
   Por eso esta noche he bajado a hablar con tigo. es una manera de darte las gracias. una especie de incluir un día mas de mi vida en el baúl de los recuerdos y saber que cuando pasen los años, sabré lo que ahora siento gracias a ti. podré reflexionar y no hacer aso a mis reflexiones, porque el pasado es pasado y por mucho que queramos aprender de él, lo mejor es asumirlo, pues cada momento, cada situación, al final son distintas y el erro del ayer puede ser el acierto del futuro o viceversa.
    Pero sé, que cuando relea esto sabré que una noche te la dediqué a ti por ser mi amigo y que en ese momento fui feliz simplemente con estar a tu lado por que tú me escuchabas aunque en realidad, nada tuviera que decirte.
    Ahora tengo que intentar dormir un poco, a sí que te dejo que descanses.
        Perdón, antes de irme.. Si tenía algo que decirte.

GRACIAS.
 

Carta a mi Dios



Composición destinada a una antología poética...... 


Carta a mi Dios...


   Que mi última gota de sangre,
sea la tinta que escriba
para ti un bello poema.

    Que el último aliento, un suspiro,
la brisa hasta tus oídos
para declamarte un verso.

    Que mi última lágrima sea el sello,
y mi último beso un adiós
que me lleve al infinito.

    Que mi último sufrimiento,
que mi última agonía,
me sirva de redención.

     Que mis desmanes pasados
no sean acreedores,
cobradores de intereses.

     Que de todo lo que di
nada a mí se me devuelva,
pues abrí siempre las manos
sin esperar recompensa.

    Que allá en el último juicio
equilibres la balanza.
  Que nunca fui egoísta,
que nunca nada pedí.
   Que no me importa el destierro
si me alejas de tu lado.
   Que no me importó la vida.
        Que no me importa la muerte.
     No tengo nada que darte
pues ya todo lo he prestado.

    Que en mi última morada
no reine la oscuridad.
     Que sean blancas las alas,
que me vengan a buscar.

    Que mi último pensamiento
sea el viaje hacia la luz,
donde con brazos abiertos
espero, me esperes Tú.



Carlos  Torrijos 
C.a.r.l. (España)









lunes, 11 de junio de 2018

Pena y Rabia


  Si señores y señoras. Pena y Rabia.
             Siempre escribo sobre cosas que a veces me atañan personalmente y a veces tan solo emocionalmente.    
        Me gusta utilizar la metáfora para no poner al descubierto lo ocurrido y frasear con sinónimos que a veces, limen asperezas que pueden ser incorrectas políticamente a ciertas sensibilidades.
           Hoy salgo despotricando, enfadado y al tiempo con impotencia ante la situación. 
    Siempre he estado en contra de cualquier tipo de discriminación, pero con ciertas acciones de la vida, nos vamos a terminar convirtiendo en “clasistas” por no poner otros apelativos.

    Hoy cuento lo que pasó alto y claro.
         Si alguien se siente ofendido, ya sabe….




--- Pena y Rabia ---

   Has entrado a trompicones
trastabillando el andar,
sujetando el equilibrio
en la puerta de cristal.
     Sentada junto a la barra
te has puesto a balbucear,
y he creído conveniente
el dejarte descansar.

     Según la historia contada
por los labios de tu boca:

     Negra fue quien te parió,
y te dejó por dinero
en manos de un traficante.

     Negro quien te esclavizó,
y a base de palos logró
doblegar tu rebeldía.

     Negro quien pagó servicios
en cuartuchos y trasteros
satisfaciendo la hombría.
      Mientras tus ojos lloraban
y el alma se te encogía.

     Negro quien en una balsa
te puso en medio del mar,
donde la vida y la muerte
viste de un hilo colgar.
      Negro quien te abandonó,
en la orilla de una playa,
con una deuda pendiente
que ahora tienes que pagar.


Negros todos menos yo.
   Y por no ser de color,
a mí me llamas racista
y me tildas de negrero,
cuando te ofrecido pan
y algo para rellenarlo
para el hambre del destino.
   Por darte ese vaso de agua
para calmases la sed
que acarreas del camino.

      ¿Tú que sabes de mi vida
si a mi lado no has comido?
    Te he escuchado con paciencia
 y  te ha importado un comino.
    Despreciaste mi comida,
pues solo,  querías vino.

    Tú me faltas al respeto
y yo mi mano te tiendo.
    Mejor pega media vuelta
y  sal por dónde has entrado.
    Hoy me has pillado de buenas,
bastante suerte has tenido
que este rato te he aguantado.






sábado, 9 de junio de 2018

Quién fuera qué.






   Me gustaría ser niño
nacido de tus entrañas
devorando el primer llanto.
    Pudiendo sentir tu aliento
junto al calor de tu pecho,
acunado entre tus brazos.


     Quiero ser amanecer
disfrutando la sonrisa
con que recibes al alba,
y ver como abres los ojos
al despuntar la mañana.


        Me gustaría ser lluvia.
    Empaparte hasta los huesos
en el camino de vuelta
desde el colegio hasta casa,
y abandonarte en la puerta
contento de tu llegada.


     Tendría que  ser la silla
que acogiera en mi regazo
ese cuerpo desvalido.
     Donde espera ropa seca
junto a la leche caliente
que humea sobre la mesa.


     Me gustaría ser viejo,
y junto a la chimenea
contarte tantas historias,
disfrazadas de verdad
quimeras que en mi invención
hacen que brillen tus ojos
desbordantes de ilusión.


    Me gustaría ser cama
para dormir a tu lado
y estar tan cerca de ti,
que cuerpo y alma sean uno,
que dos cuerpos sean un alma
 y dos almas en un puño.


    Cuanto daría por ser luna
y cuidarte mientras duermes.
        Sueño con sueño yo ser.
   Yo ser sueño y ser tu sueño,
que me sueñes y soñando
sientas que soy compañía,
y acompañando tu sueño
surquemos el universo,
hasta terminar la noche
hasta comenzar el día.