sábado, 31 de enero de 2015

Pilar


Un suave velo oscuro cubrió el cielo.
       Tras él, la tenue luz de las estrellas, perecían querer decir: estamos aquí, pero no les prestaba atención.
 Cabizbaja, marchaba junto al intenso frío que en sus huesos llevaba alojado los últimos días; a sangrar en soledad sobre un colchón vacío.

Un beso.

jueves, 29 de enero de 2015

Sin marcha atrás


Sin marcha atrás

          Piel de cera amarillenta
esperando a derretirse,
por la llama del cordel
que poco a poco se extingue.
          La palmatoria está llena
las lágrimas se amontonan
formando un cráter de lava,
lava blanca, lava pura,
y en el centro una llamita
testigo de su dulzura.
       El camino recorrido
no puedes volver a andar
todo lo que has hecho en vida
ya no tiene marcha atrás.
        La luna cuarto creciente
solicita tu presencia,
tus manos llenas de harina
para aportarle blancura
y así convertirse en llena.
      Cuando dormido te encuentres
plácidamente en la cama,
un ángel bello y sonriente
te arrullará entre sus brazos
para incorporar tu alma.
         Y después de acariciar
a esos que te llorarán,
te irás con él de la mano
entre flores de colores
por una verde pradera,
camino hasta el infinito
donde aquella luz te espera.
         Al cruzarla abrazarás
a ese que tanto lloraste
hace años, otros tiempos,
cuando callaron su voz
sin entender el motivo
amargos y crueles hechos
otro siglo, otro momento.
        Aquí se acaba la vía,
debes apearte ya
de ese tren llamado vida,
         Viaje de ida sin retorno
peaje que hay que pagar
por salir de esta prisión
y alcanzar la libertad.

Para: Dionisio Losada.




sábado, 24 de enero de 2015

Contraposición

        Según el doctor no había más remedio que extirpar una serie de órganos considerados no vitales, (claro eso dependía para quien).        La apreciación entre doctor y paciente eran totalmente distintas.    La decisión estaba entre una vida frustrada por la pérdida de sus genitales, o la frustración no hacer nada y perder la vida en unos meses.
     La esposa y psicólogo del centro hospitalario, sabían que debían convencerlo, para que accediese lo antes posible a la intervención, o sería demasiado tarde.
    En un arrebato de sinceridad a solas con el doctor, le confesó, que no le importaba la sociedad, lo que pensasen las amistades, solo quería morirse y que su mujer (aún joven) rehiciese su vida con un hombre entero.
     Frases por parte del psicólogo como:         el amor es mucho más que el sexo, la penetración no es necesaria para que una mujer alcance el éxtasis.
        La esposa se esforzaba en decirle que ella lo quería igual,  que toda una vida no se podía ver reducida solo a unos momentos de cama.
      Todo eso solo era palabrería, una manera como otra cualquiera de querer convencerlo para que se aperase, pero el después no tenía nada que ver.
            En vista de la falta de resultados, el doctor, se vio obligado a desvelar el secreto confiado aquella tarde.   
              Llegados a ese extremo, todo estaba justificado.  
    El psicólogo era un hombre joven, soltero y apuesto.
    Ella, una hembra treintañera de muy buen ver y más, tan arreglada como se presento aquella mañana en la habitación del hospital; arreglada y provocadora.
    Al momento llegó a la habitación el psicólogo.       Sin mediar palabra, tan sólo una mirada un gesto, propició que se abrazasen y besasen apasionadamente.
  El prefirió volver la cabeza para no ver lo que sucedía.
.---- ¿ya estás contento? Tú siempre serás el amor de mi vida y amante ya tengo. ¿Qué problema te frena ahora para someterte a la operación?
           En situaciones desesperadas, se toman decisiones drásticas, acertadas o no.        El final de esta historia no seré yo quien la escriba.
.--¿se operó al final?
.--¿se volvieron a ver aquella nueva pareja?
.--¿solo fue un acto impulsivo y desesperado?
      Cada uno que se monte la película como quiera, yo he puesto la bicicleta, ahora quien quiera avanzar que de pedales.


viernes, 23 de enero de 2015

LAZO ROSA

  Ella, salió de la clínica acompañada por su marido.
     Esos dos jóvenes encantadores, se subieron a un taxi para ir hasta casa.    Sí,  abrazados, pero no se dijeron ni una palabra.  Apenas cruzaron sus dulces miradas, ellos, los dos tenían mucho que decir y mucho que escuchar, pero ninguno daba el primer paso.
       Al llegar al hogar, nada cambió.        Él, no paraba de darle vueltas a una idea que tenía en la cabeza. Ella solo deseaba que el tiempo no pasase, para no tenerse que quitar aquel vendaje blanco que le protegía el pecho y que desaparecería definitivamente en una semana.
       En el ambiente enrarecido, parecía reinar la soledad  e indiferencia por parte de ambos.  Ni cenaron, pasaron todo el tiempo sentados frente al televisor;   como si la otra persona no existiese.
     Ella se subió a la habitación, se puso un pijama y se acostó, con la intención de hacerse la dormida cuando él llegase.  Él se quedó en el ordenador y luego se echó en el sofá tapado con una manta.
     A la mañana siguiente, marchó muy temprano, sin decir ni adiós, sin subir a despedirse de ella, intentando no despertar a aquella mujer que no había dormido en toda la noche, esperando su presencia en la habitación.
      Dieron las doce en el reloj de la plaza, la una, las dos y un pelín antes de que las agujas marcasen las tres, se oyó la cerradura de la puerta.
             Ella seguía en la cama, tapada, mirando el techo, abstraída del paso del tiempo y queriendo obviar lo que estaba ocurriendo.
       Una voz por fin deshizo la madeja de silencio que se había creado a lo larga del día y noche anterior.
.- ¿Dónde está la moza de la casa?
    Él con una expresión alegre.
.-----estoy a aquí, arriba
     Ella con tono desidioso.
        Mientras subía la escalera, ella le daba vueltas a las palabras que por lógica escucharía: no pasa nada,  esto es una bobada, a mí me gustas igual,………….
     Entro en la habitación, se puso a los pies de la cama de pie y se desnudó.
.-ahora ya si podemos hablar de lo que quieras, los dos estamos igual.      A ti te queda un pecho para poder dar de mamar a nuestros hijos cuando decidamos tenerlos y yo me vengo de hacer la vasectomía, eso sí, he dejado esperma congelado y poder tenerlos cuando decidamos hacerlo.  Ni tú eres menos mujer,  ni yo menos hombre por esta circunstancia...------- ¿no dices nada?
.------me has dejado de piedra
.-pues hazme un sitio en la cama y abrázame, de lo de hacer el amor ya hablamos otro día, que hoy no estoy para muchos trotes.
Se abrazaron y ahora sí, se durmieron felizmente.








martes, 20 de enero de 2015

Desde allí

         


   Me he jugado una estrofa
a que hoy no escribiría.
    Mi intención está en perderla
 y que ella gane la apuesta.

   No tengo tema previsto
ni sé por dónde empezar,
pero seguro que un hada
a mí me iluminará.

   Hada bienaventurada,
soy limpio de corazón.
   Has suspirar con mis letras
a esa poetisa amiga
que un verso te regaló.

       Aún no te vayas, espera.
   Deja el último recuerdo
de tus rimas melodiosas
tatuadas sobre esta tierra.

           .-no me voy.
     No puedo irme
sin despedirme de ella.
   Por compartir ser mujer
y por compartir la pluma,
en este precioso libro
que ahora ha salido a la luz
y mi recuerdo postula.

   Y sé, que gracias a ellas
amigas de sexo y pluma,
mis versos recorrerán
campos, montes y lagunas,
y que cruzarán la mar
en busca de otras personas
que con el mismo tesón
pongan a disposición de otros
su más inmensa fortuna.

      La fortuna de escribir.
La de envolverse en un manto,
    y pasear su lokura
    brindando a todos su canto,
Canto de amor y esperanza.
   Cantares de desamor.
       Estrofas tiernas, amables
y estribillos de ilusión.

        Ahora sí, ya me despido.
   Sigue escribiendo mi reina.
que lo que la pluma ha unido
no lo evite la distancia,
nunca quede en el olvido.
   Que siempre fui poetisa
        aunque ahora me haya ido.















viernes, 16 de enero de 2015

Para tí, Rocío

Rocío

    Rocío que con el alba,
cubres los campos sembrados
de suavidad blanquecina
sobre un verde adormilado.

    Rocío que  en nuestros pueblos
das brillo a oscuros tejados
haciendo que se iluminen
esos sitios despoblados.

    Rocío  que das frescura
a los pinos de la sierra
a las rocas encantadas
de esa mí querida tierra.

    Roció, la inspiración
de madrugador poeta
que tras su ventana ve
tu delicada silueta.

    Rocío que con el sol
te vas como mariposa
aleteando en el viento
convirtiendo el verso en prosa.

    Rocío, frente a una lente
eres musa de una vida
que espera para captarte
en gota tú convertida.

    Rocío  siempre cantada
por la guitarra española
con la rosa y el clavel
sobre una bata de cola.

      Rocío la más bonita
          Rocío la más hermosa
               Rocío  sensibilidad
                    Rocío color de rosa.

       Esto es para ti Rocío
Rocío hada, Rocío bruja.
      Luchadora por derecho
Rocío amiga, Rocío musa.




jueves, 15 de enero de 2015

Ausencia ausente

Ausencia ausente

El invierno entró en mi alcoba
Los árboles de mi armario
Desnudas tienen sus ramas,
La noche cae sobre mí
Y el frio invade mi cama.

Soledad, mi compañera
Tan solo Intenta abrazarme,
 Pero yo no lo permito
Por temor a enamorarme.

Arto de lágrimas negras
De rencor y de agonía,
Me hago amigo del cuaderno
Que en la mesita de noche
Siempre me hizo compañía.

Empiezo un nuevo camino
Y mi cama se calienta,
Por fin después de algún tiempo
Siento con felicidad
Como tu ausencia se ausenta.

No vuelvas, ya no hace falta
La primavera ha llegado
Duermo abrazado a mi almohada
Y su funda no amanece
Triste, fría y empapada.

No echo de menos tus brazos
Ni necesito tus besos,
Amantes son mis escritos
Los que comparto gustoso
Sin que eso me cause celos.

El presente reconforta
Ya no escribo de venganza,
Los sueños son deliciosos
Y el futuro es esperanza.

Ya ves, por fin me di cuenta
Que los dos hemos ganado,
Ya no te sientas culpable
Eres parte del pasado.



martes, 13 de enero de 2015

Madre, tengo miedo a que anochezca.



    Allá por el horizonte
El sol se oculta despacio
Por aguas ensangrentadas
Se desliza con cuidado
Hasta llegar a la orilla
Donde los juncos lo esperan
Para ser amamantado.
     Entre los senos robustos
De esta nuestra madre tierra
Quiere salirse del mar
Para adentrarse en la arena.
   Vigilado por las nubes
Coléricas por la envidia
Intenta huir del ocaso,
Pero el azul se oscurece
Y el rojo va dando paso,
A la noche y las estrellas
Para iluminar el mar
De blanco suave de luna,
La bruma se irá con él
Dejando ese cielo raso,
Pero intenta resistirse
Con su ojo amarillento
Tiñendo de rojo el cielo
Para intentar asustarlo,
Refrescado por la brisa
Parece quedar tranquilo
Solo el verde atolondrado.
     No te esfuerces hijo mío
Le dijo la madre tierra
Cuando amanezca mañana
Te volveré a amamantar
Y entrarás en mis entrañas.


 Imagen de la red.









lunes, 12 de enero de 2015

Ignorante solitario



Abandonaste aquel libro
Donde leer su palabra
Te rodeaste de aquellos
Que  un día del tempo echó,
Y utilizando su nombre
Arrasaste las cosechas
De semillas germinadas
Que en esta tierra sembró.

Olvidaste las bondades
Para sembrar el desprecio
Señor de vidas y haciendas
Cruel amante del poder,
Inoculador de ideas
Que nadie discutiría
Para su piel proteger.

Tu alma teñida de sangre
Pesada como el acero
De aquella bala primera
Que disparó  tu cañón
Ahora quisiera elevarse
Pero el peso de los muertos
No la dejaran marchar,
Con dientes y uñas desean
Poder  su vida vengar.

Ignorante solitario
Por negros cuervos rodeado
Nadie llorará tu muerte
Solo se repartirán
Esos bienes incautados
A cambio de inmunidad.

Solo un poeta aburrido
Recordará  tu existencia
Para intentar con sus versos
Que nadie tu historia olvide,
Quisiste el cielo en la tierra
Con muerte forjar tu vida
Y en nombre de dios reinar
Un reino lleno de viudas.

Las salvas despedirán
Tu hipócrita funeral
Ignorante solitario,
Las palabras que olvidaste
Otro las escribirá
Y servirán de epitafio.

Aquí yace aquel tirano,
Aquellos que tuvo al lado
Siempre lo reverenciaron 
Y nadie le dio su mano.





viernes, 9 de enero de 2015

Tu compañera del alma



     De tus manos se escurrió
Esa joya tan preciada,
Golpeando su frágil lente
Sobre una planta mojada,
Cubierta de hojas perennes
Por lo que no pasó nada.
   La recogiste y secaste
Con todo mimo y cariño,
Dejándola tan brillante
 Como de color armiño.
    La cogiste entre tus brazos
No se volviese a caer,
Mientras dormías la espera
Y empezaba a anochecer.
    Con el sol en el ocaso
La hora se aproximaba
Solo faltaba un instante
Para poder concebir
Aquella imagen soñada.
    Mil y un rayos de luz
Rojizos se maceraban,
Entre el verde de los pinos
Y el gris de rocas peladas
Bajo nubarrones negros
Que con lluvia amenazaban.
     Lo que captó su objetivo
No era lo que deseabas,
Pensaste en borrarlo todo
Sin saber que te esperaba
Una imagen solitaria
Aquella que tú no hiciste
Pues solo el destino quiso
Que en su caída fortuita
Chocase con una rama.
     Aquella primera imagen
De esas gotas arrancadas
De aquellas hojas perennes
Rabiosas, como enfadadas,
Precipitándose al suelo
Y en el abismo captadas.
     Solo tu fiel compañera
A la que tanto cuidabas
Podía hacer tal regalo,
Solo le faltaba hablar
Para poderte decir:
 Carlos, feliz cumpleaños.

  Dedicado a Carlos Morcillo en su cumple.
          FELICIDADES








jueves, 8 de enero de 2015

Flamenco



      Cuerdas negras de guitarra
los dedos acariciaban.
    Palmas sordas y un cajón
al quejío acompañaban,
desde lo alto, la luz tenue,
el cortejo iluminaba.

     Bata de cola azabache
por el tablaó se desliza,
manos dibujan al viento
hechizo, que martiriza.

    Peineta negra calada
cubierta por largo velo,
deja imaginar un rostro
repleto de desconsuelo.

     Lagrimas por sus mejillas
rompen con rabia el silencio.
      El taconeo en las tablas
convierte su baile en fiero,
la guitarra se desboca
y el quejío; se hace lamento.

    Un grito desesperado
hace de nuevo el silencio,
porque le baila a su padre,
su padre, que ya está muerto.
    Gitana tenía que ser
pá tener aquel talento,
Su padre, hubo de morir...
pá darle vida al flamenco.

Imagen de la red