sábado, 4 de enero de 2014

Carta a los reyes


 

   Queridos reyes magos;

                                        Este año, creo que me he portado bien.   He intentado no hacer mal a nadie y ayudar en lo posible a aquellos que lo necesitaban.

    Seguro que habrá habido aciertos y errores, no soy perfecto ni pretendo serlo, solo intento hacer caso a mi conciencia, que creo no me da malos consejos.

     Os podría pedir trabajo, pero tenéis demasiado poco, para tanta gente que lo necesita.

   Os podía pedir amor, pero por suerte estoy rebosante de él y lleno de orgullo de aquellos que me quieren.

   Os podía pedir salud, pero con que siga la cosa igual, tampoco me puedo quejar.

   Os podía pedir un juguete nuevo, pero con el que tengo me es suficiente.

   Os debería pedir que mi juguete funcionase, pero los imposibles siempre se quedan reducidos en una mera y a veces frustrante ilusión.

      Solo os pido que os acerquéis por mi casa, deis en beso en su frente y recarguéis sus pilas. Para que su sonrisa no deje de fluir.

    No os pediré que arregléis las deformidades de su cuerpo y mente, solo que se mantenga estable y que no sienta ningún dolor.

    Ya, puestos a pedir, tal vez, podíais retocarle a la baja un poquito el “chip” del geniecillo que se gasta.

      Tal vez os pido demasiado, pero por algo debe de ser, que os llaman los reyes magos.

1 comentario: