Por ti.
Abriré los ojos cada mañana
y al posar mis pies descalzos
sobre el suelo de la alcoba
dibujaré una sonrisa.
Por ti.
Abrazaré los fríos vientos
con el corazón latiendo
para que todo mi amor
se mezcle entre tus cabellos
cuando estás lejos de mí.
Por ti.
Pasaré el día pintando
pajaritas de papel
que vuelen hasta tu mente
haciéndote recordar
que siempre estaré a tu lado.
Por ti.
Esperaré impaciente
los mensajes que me envías.
Ahora salgo.
Ya llegué.
Que te quiero.
Cómprame.
Por ti.
Esperaré el gran momento
después del anochecer
de la hora del regreso
para sentir ese abrazo
sabiendo que nuestro techo
ya nos tiene cobijados.
Por ti.
Cada noche dejaré
mis labios sobre tu frente
deseando bellos sueños
para comenzar de nuevo
a la mañana siguiente.
Y por ti toda la vida
de nuevo amaneceré.
Solo por ti vida mía,
tú mi preciosa alegría
serás la luz de mi ser.
Para mi hija Lucía
Hoy. Simplemente por ser hoy.
Maravillosa poesía, maravilloso padre...maravillosa hija que te inspira....maravilloso amor de familia. Te felicito querido amigo Carlos. En tu senda poética siempre, America Santiago.
ResponderEliminarQue ternura de padre. Maestro es usted un GENIO de la lampara de Aladino. Felicitaciones.
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