Angélica-22.- Preguntar para saber

   Andando despacito, sin prisas llegaron a la pensión.

          .-Buenas, ¿Qué tal la tarde?

     .-muy bien, entretenida

        .- ¿han llamado del convento?

           .-si, pero no las he querido molestar, solo llamaban para comprobar que funcionaba y para que les dijese que sobre su mesa está la factura y el número de cuenta donde hacer el ingreso

    .-subimos un momento a la habitación antes de cenar

          .-.-esperen, les acompaño.  He pensado que en su habitación como es más tranquila, duerman ustedes dos y como enfrente hay dos individuales, una para Angélica y otra para su padre; si les parece bien

.-da igual, solo utilizaremos una, porque estaremos hablando toda la noche

    .-pero habrá que dormir algo, que mañana tu padre tiene otra vez viaje y tiene que ir descansado

    A la hora de la cena, la dueña, no daba crédito a lo que escuchaba en sus conversaciones: se hablaban de tú, usaban nombres en diminutivo; ella siguió a su trabajo y a otra cosa mariposa, no era su problema.

      Terminada la cena:

            .-jolín Bea, no ha dejado nada en los platos

.-y eso que está delgadita

             .-si como yo así, no entro en los pantalones

    .-es lo bueno del hábito

        .-a partir de ahora diré a la cocinera que le ponga ración doble

    .-si yo no paso hambre

.-claro cada vez que venimos, coge reservas para un mes

    .-tú a callar, parlaembalde

.-ya me tocó

             .-te está bien empleado, que no puedes tener la boca cerrada ni debajo del agua

        .-que ganas tengo de coger la cama

    .-suban, hablaremos un rato en nuestro cuarto y luego cada mochuelo a su olivo

      Sor Beatriz se quedo un momento hablando con la dueña.

    .-señora, deme la llave, por si acaso

         .- ¿pero no ha dicho que se van a dormir?

    .-ya veremos; por si no nos entra el sueño

        .-tenga, y no hagan ruido al volver

       Los cuatro sentados en la habitacón doble, charlaban, se alegraban de haber pasado la tarde juntos.

     .- os apetece ver la ciudad de una manera diferente

          .-estoy cansada

     .-es muy sencillo, ¿verdad Angélica?, solo hay que salir al pasillo

    Tras los cristales, un barrio con sus calles casi desiertas.

    .-Me estoy acordando, no podemos volver sin que vea una realidad

        .- ¿no pretenderá que vallamos a la discoteca?

    .- no. Una cosa es jugar a ser amigas y otra es faltarle al respeto llevándola a un antro de vicio y perversión.

.-vamos a dar una vuelta

    .- ¿y a ti quien te da permiso para venir?

.-porque Pepe, tendrá que pasar por un cajero, si no, mañana nos vemos fregando todo el día para pagar la pensión

      .-pero que a mí no me apetece salir

         .-Inma, ¿te importaría dar un paseo nocturno y tranquilo por el centro?

.-ole, este es mi padre

       .-pero volvemos pronto

   .-de acuerdo.

     Esta vez, no les hizo falta coger ningún taxi, el coche de Pepe, estaba aparcado en la misma puerta.

         .- ¿dirección?

.-toda esta calle hasta el fondo y luego cogemos una avenida y al final se ve un gran parque, por allí paramos

         .-en marcha

     Después de aparcar, fueron a pasear por donde ellas ya lo habían hecho la última vez.  Aunque no fuera viernes la noche mostraba casi el mismo aspecto.

    .-este puede ser el destino de muchas de nuestras internas si no ponemos algo de nuestra parte.

     En una misma esquina había dos prostitutas esperando a algún posible cliente.

          .-qué asco, que descaradas, ahí con todo al aire

     .-mejor diga, que pena, que se tengan que dedicar a eso

         .-pues que se pongan a fregar escaleras

    .- ¿y quién sabe sus motivos?

         .-voy a hablar con ellas, dejadme ir sola

.-ya la hemos liado

         --Se acercó para tratarlas despectivamente--.

        .- ¿porqué estáis aquí con esas pintas?

            .-deje de preguntar y váyase a rezar. Si me da dinero para un chute, me voy pá casa, ¿hace?

       .- ¿Qué es eso de un chute?

            .-pues un chute, heroína, aunque con una rayita de coca también me conformo

       .-encima drogadictas

            .-sí, y además putas, ¿tiene algún problema?

                .-vamos, marche de aquí que nos espanta a los clientes

     .- ¿Qué?, ¿está decepcionada?

         .-sí, pero seguro que con el tiempo quizás algún día se acerquen a dios, hoy, simplemente les estorbo

     En la otra esquina, un cajero. Al ir a sacar dinero, allí se encontraron con un mendigo durmiendo en un rincón. Abrió los ojos y ni se inmutó por su presencia.

              .- Hagan lo que tengan que hacer, yo no les molesto

      Mientras el padre sacaba dinero de la tarjeta. Inma, volvió a abrir la boca.

      .- ¿y por qué está usted durmiendo aquí?

         .-no te jode la mea pilas, porque no tengo ganas de dormir al raso

     .-oiga que yo no le he faltado

         .-pues haga la prueba, quédese a dormir en un banco del parque, y luego a las seis, viene y me lo cuenta

  .-vamos

        .-lo siento, que pase buena noche

               .-tenga esto para que mañana por lo menos desayune caliente

            .-gracias y perdonen mi mal humor

    .-no seas metija

         .-pero si no pregunto, ¿cómo lo voy a entender?

.-en eso tiene razón

    .-tú encima apóyala

        Una pareja se amarraba contra la pared; al pasar por su lado, vio como él, tenia el pantalón desabrochado y ella le tocaba los genitales

         .- ¿pero no os da vergüenza?

     No le hicieron ni caso, ella insistió con lo que lo único que consiguió fue una mala contestación.

           .- ¿Qué pasa vieja, te apetece que hagamos un trío?

   .-ves, por meterte donde no te llaman
    --Angélica cogía la mano de su padre y le hacía gestos para que no se metiese --

       Siguieron paseando y todo a su alrededor era lo mismo, excepto los corrillos de jóvenes bebiendo. Claro era diario, no era día de botellón.  Una mala contestación que se ahorró.

       Poco a poco llegaron a la puerta de la discoteca. Se quedaron parados en la parte de arriba de la ancha escalera. Les apetecía entrar, pero en ese caso la iniciativa la tenía que tomar ella ( la superiora).

    El portero miró hacia arriba y subiendo los pasos de dos en dos, se dirigió a dar la bienvenida a la hermana.

       .-pensaba que jamás las volvería a ver, que sepa que desde entonces, algún que otro día, cuando se alarga la noche, al salir de trabajar, me acerco hasta aquella iglesia y aunque no me quede a oír misa, si rezo un ratito por ustedes

.-algo consiguió al final

    .-no sabes la alegría que me das

        .-es un buen sitio y tranquilo para pensar en los reveses que da la vida. Pero bajen, saben que están invitadas a todo y deles caña a sus amigos, han entrado hace un rato 

    .-perdón, esta es la madre superiora y este el padre de Angélica

        .-me alegro de conocerles, no se imaginan lo maravillosos que son estos dos personajes que les acompañan

   .-bajamos

        .-ya que nos invitan habrá que entrar, pero son más de las doce, se acabó el tuteo y los nombrecitos, por favor para ser respetadas tenemos que demostrar respeto nosotras.

   .-desde luego madre

             .-y a mi ¿Cómo me van a llamar? Padre

          .-no, José le queda bien

     Accedieron al interior; el portero se fue directo a la barra.   .- barra libre para los cuatro

     La madre se quedó mirando fijamente a las luces del techo de la pista.

     .-que mareo

        .-Agárrese de mi brazo, vamos a sentarnos a una mesa

     .-gracias José

   Los taburetes, no es que fueran muy cómodos, pero mejor que de pie.

         .- ¿que desean beber?

   .-yo, una naranja

      .-a mí me apetece solo agua

.- ¿puedo pedir una Coca-Cola?

          .-no, por la noche no

.-bueno pues una granadina con naranja

     .- ¿ese ungüento?

.-que no lleva alcohol

          .-yo, lo estoy pensando y con su permiso me pediré un Whisky con hielo

.-pero muy cortito, que luego tienes que conducir

          .-no me daba cuenta, tienes razón, mejor una tónica

     Mientras estaban pensando lo que pedir, los tres amigos que se habían percatado de su presencia, esperaban el momento idóneo para salir sin ser vistos. Cuando José y Angélica estaban pidiendo en la barra y ellas mirando como bailaban en la pista, se fueron deslizando por la zona de la salida de emergencia, hasta llegar a la puerta.

    Allí tapando la salida se encontraron de bruces con el portero.

    .- ¿donde os pensáis qué vais, compañeros?

        .-nada a dar una vuelta

    .-justo, ya os podéis dar la vuelta. ¿Os pensabais ir, sin ni siquiera saludar a la hermana?

        .-no nos jodas tío, que encima hoy hay dos

    .-por eso, ¿no queréis conocer a la madre superiora y al padre de la niña?

       .-va venga déjanos salir y luego volvemos

   .-mejor salís luego