Si
te escudas en mi ausencia
¡Lo niego!
Demasiado tiempo viendo
como se me iba la vida
mirando por la ventana,
esperando tu regreso.
Ahora otros labios me besan,
la paciencia se acabo,
ya no suplico tus besos.
Si me acusas de ser cruel
¡Lo niego!
Tu amigo, mi amiga,
eran cercanos igual.
Los dos comieron en casa,
a los dos dimos cobijo
en noches de soledad.
Si me dices que fui infiel
¡Lo niego!
Fui
consecuente con tu libertad.
Tan solo seguí tus pasos
aprendiendo las lecciones
de cómo debía actuar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario